Policía se acuesta en el suelo para jugar con las muñecas junto a unas niñas: tenían miedo de él
¿Entre las tareas de un policía se pueden incluir también jugar a las muñecas junto a las niñas? Sí, según el oficial Fleming del departamento de Mecklenburg Manor, en Virginia. Aquí el policía ha sido fotografiado por una madre mientras juega en el suelo junto a su hija con las muñecas precisamente el día de San Valentín.
El policía había sido llamado junto a su patrulla por una peligrosa fuga de gas que parecía haber ocurrido en un edificio y había obligado a todas las familias de la zona a salir de sus viviendas. Cuando Fleming vio que las niñas tenían miedo de él, pensó que era importante hacer algo inesperado.
via CBS 6
"Llevar un rayo de luz a la vida de las personas es tan importante como proteger su seguridad." dijo Fleming. Este policía está convencido que su tarea no es solo reprimir el crimen, sino también mejorar la calidad de vida de las personas.
"Cuando vi el terror en los ojos de esa niña entendí que debía hacer algo para cambiar la situación", contó Fleming.
Entonces, el oficial, una vez que constató que la situación de peligro había terminado, se puso a jugar con la pequeña asustada por los uniformes. Siendo particularmente alto e imponente, se acostó sobre la acera para no asustarla. Luego, una vez sentado con ella en el pasto del jardín, perdió tiempo jugando con sus muñecas.
Cuando la madre de la pequeña, Iesha Roper-Boswell, de 28 años, vio la escena no podía creer a sus ojos.
Después de haber fotografiado la escena llamó a sus nietos y a los otros niños del barrio que también huyeron porque estaban aterrorizados por la policía. Fleming mostró toda su paciencia y pasó más tiempo coloreando cuadernos con ellos.
"Este hombre le ha mostrado a los pequeños que no hay que asustarse cuando se encuentra a un hombre con uniforme", explicó Iesha, "Ha sido hermoso para todos nosotros saber que tratamos con una persona amable y lejana de la violencia. El resultado es que hoy, muchas personas del barrio simplemente no llaman más al número de la policía, llaman al cabo Fleming. De esta manera están seguros que pueden ser escuchados por una persona humana y comprensiva."
Estamos seguros que los superiores de Fleming cerrarán un ojo sobre la pérdida de tiempo de su cabo, dado también el éxito que tuvieron las fotos en las redes sociales.
"Cuando elegí este trabajo", dijo el policía "lo emprendí sabiendo que no solamente se trataba de hacer multas o utilizar la fuerza para imponer la ley. Lo he elegido para vivir en una sociedad más justa y armoniosa."
¡Muy bien, agente Fleming!
