Una mujer encuentra una abeja en dificultad...y estrecha con ella una union que supera cualquier imaginacion
Al comienzo de la primavera del 2017 Fiona Presley tenia la intencion de hacer jardineria en su casa escosesa, cuando el ojo le cae sobre un insecto que vagaba a sus pies: una reina de abejorro. Para evitar que viniera pisoteada, Fiona la recoge y solo entonces se da cuenta de un aspecto extraño: el peludo insecto no tenia alas. La mujer le ofrece el agua azucarada y lo apoyo sobre na flor en cercania, esperando pudiera arreglarsela por si mismo. Pero cuando, algunas horas despues, fue a controlar, lo encontro aun alli, inmovil: con un temporal en el horizonte, decide entonces de hacer alguna cosa mas para ayudarlo.
via Lars Chittka
Fiona penso de llevar la criosa reina sin alas al calor de su casa, para nutrirla con otra agua azucarada y tenerla al reparo de la lluvia. Pero el temporal duro tambien el dia sucesivo, asi fue obligada a tenerla por dos noches consecutivas.
La compasiva mujer contacto la asociacion Bumblebee Conservation Trust, que se ocupa justamente de estudiar estos delicados animales y sensibilizar a los ciudadanos al problema de salvaguardarlos. Luego de haber contado la situacion, viene a saber que era probablemente un virus el responsable de la mutacion que no habia permitido a las alas de la reina de desarrollarse, y que, abandonada a si misma, tenia de verdad poquisimas oportunidades de poder lograr sobrevivir.
Fiona tenia entonces dos posibles alternativas: dejarla morir sola o probar a darle una oportunidad. Elibe la segunda y activo toda su creatividad.
La abeja reina, ahora oficialmente bautizada Bee, tenia necesidad de un jardin en donde pudiera nutrirse, estar al reparo de posibles depredadores, y no someterse a la competencia de sus parientes alados, mas veloces que ella. Asi Fiona le construye un jardin personal y recintado, lleno de suculentas flores de la cual chupar el nectar.
Cada dia Fiona iba a controlar que estuviera bien, llevandole agua azucarada como refuerzo a su dieta y cambiandola dentro de la casa cuando el tiempo se ponia caprichoso. A este punto comenzo a ocurrir algo sorprendente.
Cada vez que Fiona se paraba cerca del jardin de Bee y abria la cubierta, la reina emergia de su escondite de flores para acogerla. El animal se trepaba sobre los tallos hasta llegar a la mano de la mujer, demostrando un sentimiento que tenia todas las cartas en regla para ser definido "alegria".
La mujer comenzo a admirar este comportamiento con gran curiosidad, conciente de estar frente a un fenomeno mas unico que raro.
Bee parecia amar el hecho de no estar sola: el contacto con la mujer parecia despertar al pequeño insecto, donandole vitalidad tambien en el dia en que parecia mas letargico. Los abejorros son criaturas extremadamente sociales, y Bee lo estaba demostrando.
Amigos y familiares se daban cuenta y a primera vista: entre Fiona y Bee habia una verdadera y propia union, que no era obviamente hecho de sonrisas y palabras sino de pequeñas reacciones y matices, bien visibles inclso para un ojo no experto.
La union fue adelante algunos meses, pero no obstante los eventos extraordinarios el reloj viologico de Bee habia igualmente hecho sus pasos. En la naturaleza la reina de los abejorros viven una sola estacion: construyen el nido en primavera, ponen arriba una colonia que vuela en los campos por el entero verano y que eclocionan la primavera sucesiva.
Asi un dia, transcurrido casi cinco meses de su salvataje, Bee se ha dormido en la mano de Fiona, sin despertarse mas. Ha sido luego sepultada en un angulo al reparo y discreto del jardin, acompañada de su flor preferida.
Fiona sabia que habria sucedido y ha recibido el evento con la conciencia de haber regalado a su pequeñ amiga una vida feliz y mucho mas larga de aqella que la naturaleza habia previsto para ella.
Esta experiencia le ha enseñado a ella, y a todos nosotros, que hay muchos aspectos que no hemos todavia descubierto acerca de este mundo y los seres que lo pueblan. Un pequeño insecto de nombre Bee ha demostrado "sentimientos" que ningun experto habia jamas registrado en su especie, y esto nos hace ver estos animales bajo una optica totalmente diferente.
La historia ha llegado tambien a Lars chitta, profesora del departamento de ecologia de Queen Mary University de Londres, que ha subrayado la extraordinariedad del evento, concluyendo: "A veces sinven afectuosas observaciones, como aquellas de la señora Presly para generar nuevos puntos de vista y abrir nuevos horizontes".