La parábola del anillo que nos enseña de tener siempre confianza en nosotros mismos
Con poca autoestima se puede nacer o se la puede perder en el transcurso del tiempo con experiencias negativas. En cada caso es siempre bueno buscar de reconquistarla, para poder vivir mejor en el mundo o sobre todo con sigo mismo. Si tambien ustedes estan viviendo una fase en que no tienen seguridad, estan siempre indecisos y son los primeros a no creer en vuestras capacidades, aqui una parabola que les enseñara alguna cosa muy importante, de tener en mente en los momentos de debilidad.
Un dia, un anciano sabio recibio de visita un joven que refiriio de tener poca autoestima y de sentirse aplastado de las presiones de los demas.
"Me dicen que no valgo nada, que cada cosa que hago me equivoco, que soy ridiculo y poco inteligente para mejorar mi situacion..." el sabio lo interrumpe cuidando poco a sus palabras: "Lo lamento por ti jovencito. Igualmenta ahora estoy ocupado y no puedo escucharte. Es mas, si vas al mercado en mi lugar, me liberare antes en modo de poder resolver tu problema"
El joven se sintio nuevamente disminuido y puesto en segundo lugar, pero igualmente acepto el encargo del sabio.
"Ve al mercado y busca de vender este anillo. Acepta cualquier oferta, basta que no sea inferior a una moneda de oro".
El joven fue al mercado, confiado de llevar al sabio su ganancia.
Muchas personas se pararon a observar su anillo, pero el interes de ellos cesaba en el momento en que venian a conocer el precio: "Joven, te podria dar al maximo un par de monedas de plata, pero una monera de oro es exagerado". Luego de haber sido cubierto de burlas e insultos, volvio junto al sabio desconfortado.
"Maestro, lo lamento, pero en el mercado ninguno ha creido en el valor del anillo. Me han ofrecido incluso una olla de cobre!". dice.
El sabio no se perturbo, mas bien le viene una idea: "Joven, tus palabras me han dado una inspiracion! Se necesita hace evaluar el anillo a un experto. Corre al joyero y escucha su parecer".
El joven se encamina al joyero del pueblo, el cual, luego de haberlo observado atentamente al anillo, afirmo: "no te puedo dar mas de 58 monedas. Si tu patron no tiene prisa, lo podre evaluar mejor y llegar a 70, pero por el momento la oferta es esta."
El joven no cree en las palabras del joyero, asi volvio rapidamente al sabio para repetirle todo. El sabio escucho las palabras del joven, para luego concluir: "Mi querido, espero que tu hayas aprendido alguna cosa. Tienes la solucion al problema por la cual has venido a mi. Como has visto en el mercado, ninguno ha comprendido el valor del anillo porque ninguno era un experto. Pero el anillo, tiene un valor, y tambien elevado. Del mismo modo, no deberias cuidar el juicio que las personas tienen de ti. La gente no conoce el valor que tienes, asi como aquel anillo. Cree tu en primera persona en tu grandeza y veras que te sera muy facil ignorar el parecer de los otros."
El joven se fue, finalmente conciente de su valor y del anillo que el sabio le regalo.
