Para una madre, el hijo puede ser como el "príncipe azul": el único y verdadero amor de su vida
En el mundo de las fabulas hemos siempre visto a la mujer en busca del principe azul, que la haga vivir un sueño, que la trate como verdadera princesa. En el mundo real, la fabula asume modificaiones, pero de hecho la persona que se elige de amar encarna un poco el rol del principe azul. Por cuanto estable la relacion sea, se necesitara por siempre rendir cuenta de la realidad, o al hecho que el amor pueda terminar, cambiar. Entonces, el principe azul existe solo en las fabulas? No. Para las mamas, el verdadero principe azul es el hijo varon.
No es cuestion de tener preferencias entre hijos varones e hijas mujeres; es normal que cada mujer viva de otro modo la maternidad - en terminos de sensaciones- segun el sexo del hijo. En el caso de los varones, mucho mas probablemente la mujer nutrira hacia ellos un sentimiento que se asemeja mucho al amor de las fabulas por el principe azul.
Sobre el hijo varon, una mujer proyectara aquel halo de gentileza, de transparencia espiritual, de honestidad que en el mundo de las fabulas rueda alrededor dde la figura del principe. Es con el hijo varon que una mujer sentira nacer la emocion de estar profundamente ligada a una criatura, de la cual no sera jamas traicionada, como quisieramos que sea tambien en la vida real.
Con un niño, una mama se derretira al ver dos ojos grandes que la fijan, que le sonrien, que incluso sin hablar la hacen sentir valorizada como mujer; por haberlo llevado a la luz y para continuarlo a tener en vida gracias a nutrirlo y a sus cuidados.
Probablemente, el amor entre hijo y madre es aquel mas cerca al ideal de amor incondicional. Este pequeño hombre llena el dia de una mujer de amor, de serenidad, de desafios. Comenzara a crecer pronto y a aquel punto la mama le enseñara a mover los primeros pasos solo hacia su vida, pero sabiendo siempre de poderle dejar un espacio en el corazon.
No habra remordimientos ni excusas, la mama se acunara sobre la certeza de haber hecho nacer una criatura que la ha salvado, que le ha hecho ver de que belleza esta hecha la vida. Es por eso que podemos decir que por cada mama, tener un hijo varon es como haber encontrado el verdadero principe azul, por siempre.
