Una mama pierde a su hija en el nacimiento: la carta que escribe a las enfermeras hace romper el corazon

por Patricia Zorzenon

05 Diciembre 2018

Una mama pierde a su hija en el nacimiento: la carta que escribe a las enfermeras hace romper el corazon
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Perder a alguien querido es una cosa que dificilmente se logra aceptar, especialmente cuando se pierde un hijo. El amor que un padre puede dar a los propios hijos es totalmente desmisurado, que a menudo es dificil para los pequeños darse cuenta y desde el momento que se van, para estas madres y estos padres se abre una profunda herida, que dificilmente se margina. Es el caso de Rachel Whalen y de su marido, por la cual aquel 22 de febrero del 2016 es un dia que ha quedado imborrable en sus mentes.

via godupdates.com

An Unexpected Family Outing/Facebook

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En el 2015, Rachel queda embarazada de la pequeña Dorothy, luego de haber tenido dos abortos espontaneos en el primer trimestre. El embarazo parece proceder bien, cuando al septimo mes le viene diagnosticado la preeclampsia, una enfermedad que compromete la vida ya sea de la madre que del pequeño en el grembo. Luego de una semana de monitoreos en el hospital, su hija muere al nacer, mientras ella logra sobrevivir. En estas horas asi oscuras para ella y su marido, el apoyo de las enfermeras del reparto donde estaba internada, ha sido fundamental para ir adelante

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An Unexpected Family Outing/Facebook

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Es a ellas que ha querido escribirles una bellisima carta de agradecimiento por todo aquello que han hecho por ellas dos y su Dorothy.

A las enfermeras, gracias por haberme salvado. Vuestras habilidades y conocimientos me han salvado en el despues de la muerte de mi hija, ha sido vuestra compasion a guiarme hacia la vida. La humanidad que me han demostrado es aquella que me ha llevado a la vida, que me ha hecho posible pensar en la vida despues de la muerte. Por esto, les debo todo mi gran amor y mi infinita gratitud. 

Gracias a las enfermeras que se han asegurado que mi marido tuviera siempre los almohadones bajo la silla, cuando estaba conmigo en el hospital. Gracias por haber ocurrido que, en un cierto sentido, tambien èl tenia necesidad de cuidados.

Gracias a la enfermera que me ha acompañado en terapia intensiva y por haber estado en mi lugar, mientras luchaba por la vida. Gracias por haber tomado cuidados de mi ya sea fisicamente que moralmente, en el momento mas dificil de mi vida. Tu abrazo me ha llevado una enorme luz en mi mundo casi oscuro.

An Unexpected Family Outing/Facebook

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Gracias a la enfermera en terapia intensiva, que ha venido a limpiarme luego de la muerte de mi hija, por haber dedicado un poco de su tiempo para lavarme el rostro y cepillarme los cabellos.

Gracias a la enfermera que se acercaba a mi cama y preguntarme por Dorothy. No olvidare jamas el modo en que se apoyaba en mi cama y me preguntaba como estaba, como si mi pequeña estuviera todavia alli.

Quiero agradecerles por haber aprendido nuestros nombres y aquel de nuestra hija. Sentirlas pronunciar, para nosotros ha significado tanto, como si fuesemos todos parte de una unica familia.

Gracias a la enfermera que me ha tenido la mano la primera noche que he pasado sin Dorothy y me ha contado la historia de su hijo apenas nacido, haciendome salir del capullo que habia construido por el dolor de la perdida de mi niña.

En fin, quiero agradecer a las enfermeras que han estado cerca durante el embarazo de la hermanita de Dorothy, Frances. Su nacimiento no me ha hecho madre por primera vez, sino por segunda, porque yo soy madre de dos niñas.

An Unexpected Family Outing/Facebook

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Luego que aquello ha pasado, Rachel ha decidido de abrir un blog para ayudar a otros padres, que como ella han vivido o estan viviendo una experiencia parecida, difundiendo su historia. El dolor de la perdida de un hijo es una cosa que dificilmente se puede explicar con palabras. Saber de tener al lado alguno que se toma cuidados de ti, ya sea fisicamente que moralmente es importante en estos momentos, ayuda a superar el dolor acompañandolos lentamente a afrontar de nuevo la vida.

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