Los hijos son pequeños solo una vez: disfrutemos su presencia, sin pensar demasiado en el futuro
Es verdad que en las primeras semanas y meses de vida sufriran grandes cambios, cambiara nuestro estilo de vida para dejar el lugar a otra rutina como padre y madre. Habran noches de insomnio, un cansancio que se hara sentir siempre mas, asi como aumentaran las preocupaciones por la salud del pequeño.
A veces puede ocurrir que en vez de disfrutar los momentos presentes con nuestro bebe, se sueñe con que las cosas cambien rapidamente, para poder respirar un poco. Y asi nos encontramos viviendo el presente pensando en el futuro y no disfrutando el presente mismo.
Buscamos entonces de no pensar solamente en las noches de insomnio, en los miedos y en el cansancio de los primeros años de padres, pero disfrutamos tambien las cosas maravillosas que ocurren en la infancia de nuestros hijos.
En un solo año nuestros niños cambian en modo increible, pasando de depender enteramente de nosotros a estar en grado, ya en su primer año de vida, de sentarse solos, algunos de hacer los primeros pasos y otros se hacen expertos en comer sin necesidad de ayuda.
Asi un dia nos damos cuenta que nuestro precioso bebe ha crecido, que tendra siempre menos necesidad de nosotros y que no podremos hacer nada para impedir su independencia.
Aprovechemos entonces ahora que es pequeño, considerando que las etapas dificiles tienen tambien su lado positivo: hoy somos su mundo, su lugar seguro. Se dirige a nosotros y nos llena de besos y abrazos.
Nuestro bebe es nuestro fan mas apasionado y ama imitarnos. En la infancia, la imaginacion de nuestro bebe es increible, nos invita a jugar con èl, a ser de nuevo niños con su inocencia y alegria. Disfrutemos aquella sonrisa inocente, entonces, aquella pequeña manito que queremos no dejar jamas ir.
Un dia todas aquellas cosas desapareceran. Pronto nuestro bebe no querra mas nuestros besos o que lo tomemos por la mano por la calle porque es mas grande. Llegara un dia en que preferira salir con sus amigos mas que con nosotros, sus padres. Entonces, disfrutemoslo ahora que es pequeño y saboreemos su presencia en nuestra vida dia por dia.
