La atracción física, sin aquella mental, a veces no basta para hacer funcionar una relación
Caminamos por la calle y a un tramo nuestros ojos vienen a ser capturados de la belleza de una persona desconocida que, como un iman, captura nuestra atencion e imaginacion; a quien no le ha ocurrido una situacion parecida. Que el aspecto fisico tenga su peso despertando nuestro interes y quizas hacerse enamorar es absolutamente recurrente.
Pero como descontado, deberia ser confirmado que la belleza fisica sola, no basta para poder crear y sobre todo mandar adelante una relacion; indispensable es la atraccion mental.
via Psychology Today
Seguro, si no hubiesemos estado capturados de aquella mirada magnetica o aquel rostro fascinante, quizas no hubiesemos estado jamas tentados de acercar aquella persona por descubrir, conociendole todas sus cualidades personales.
De hecho, la atracción física puede ser un importante catalizador de nuestra atención, pero no es suficiente: si el objeto de nuestro deseo, tal vez inicialmente físico, no conquista nuestro interés intelectual, emocional, incluso la llama de la pasión más atormentadora termina por apagarse con el tiempo.
La relación de una pareja nace espontáneamente cuando dos personas se encuentran totalmente bien para afrontar la vida juntas, de no poder hacer a menos una de la otra.
Se lo advierte claramente cuando a un cierto punto del dia se aflije por un problema y se quisiera simplemente encontrar el alivio de alquella persona que sea en grado, con un abrazo de aliviar todo nuestro sufrimiento.Pero se lo siente, igualmente, cuando estamos felices por una cosa, y quisieramos compartirlo con aquella persona, porque aquello no iria que multiplicar nuestra - y la suya - alegria.
Queremos sentir que estando junto a nuestra pareja podemos desnudarnos de cada mascara social, cada superficialidad, para vivir en liviandad y plenitud todos nosotros. Y eso ocurre porque sentimos de ser comprendidos en lo profundo y que la otra persona conoce a tal punto nuestra alma, de amar tambien nuestros defectos y viceversa.
De frente a la totalidad y a la profundad de una relacion de amor que es autentica, el aspecto estetico es absolutamente irrelevante. Incluso porque el verdadero amor es siempre maravilloso a los ojos del enamorado.