Aquí la estupenda reflexión que cualquiera que tenga un perro en su vida debería leer
Solo quien tiene o ha tenido un perro puede entender que cosa quiere decir estar involucrados en una avalancha de afecto incondicional, de pura alegría por el solo hecho de estar en su compañía. Un amigo de 4 patas no es sin embargo solo un juego y alegría sino también empeño y responsabilidad. Se necesita tomar cuidados de él, darles de comer, llevarlo de paseo, todas cosas que requieren no solo tiempo sino también dinero. La recompensa de hecho es una cosa incalculable.
Estas palabras son dedicadas propio a quien tiene la suerte de tener en la propia vida un compañero así:
Mi perro no es mi hijo, sin embargo yo soy su madre. Tengo muchas personas que me dicen que trato a mi perro como si fuera mi hijo, sé que no lo es, pero para mí es como si lo fuera. El no será más grande, no se irá de casa y no podrá cuidar de mí cuando sea anciana. Tendrá siempre necesidad de mí para comer, beber o simplemente para salir a dar un paseo.
No será jamás un adolescente rebelde y no peleará conmigo como sucede con los jóvenes de esa edad. Pero se también que de él no podrè jamás escuchar palabras como "gracias", "tengo necesidad de tí" o "te quiero muho". En compensación no me juzgará jamás por mis ideas, no le importará mi humor y no me criticará jamás.
No obstante no haya heredado nada de mí, sabe muy bien cuando estoy feliz o triste y siempre estará a mi lado. Lo veré crecer y envejecer a mi lado y siempre estaré con él, simplemente este será el camino que tomaremos juntos.
Sé que mi perro es un animal, no es una persona o un niño, pero piénsalo: ¿no es el amor lo que define a una madre?
La autora de esta reflexión se llama Conchita Moreno, quien en pocas líneas logró plasmar perfectamente la idea de lo que un ser humano puede sentir cuando establece un vínculo sincero con su perro. A menudo, los comentarios despectivos hacia aquellos que aman "demasiado" sus propias mascotas provienen de aquellos que nunca han tenido ninguno y, por lo tanto, no saben absolutamente de qué están hablando.
Nadie quiere insinuar que un perro es igual o mejor que una persona, pero especialmente cuando un individuo está solo y tiene mucho amor para dar, ¿qué tiene de malo concentrar su afecto en una criatura tan única?