El secreto de Séneca para calmar la mente eliminando las preocupaciones inútiles
Ocurre a todos de no poder hacer a menos de pensar que la vida y todo aquello que ella contiene, de las experiencias positivas hasta aquellas negativas, sea una continua catalogación del bien y del mal, de fenómenos que no podemos hacer otra que inserir en dos grupos contrapuestos entre ellos: aquellos que son dañinos para nuestra vida y aquellos que nos procuran serenidad y satisfacción, evitando los primeros.
La cuestión psicológica moderna ha llevado adelante la idea por la cual nos preocupamos demasiado y a menudo inutilmente. Incluso Séneca los había precedido.
via Filosofico.net
Según el gran filósofo de la antigua Roma, la concentración de nuestros pensamientos sobre los aspectos negativos de nuestro vivir no nos hace transcurrir nuestros días con a justa serenidad. En el intercambio de cartas con el amigo Lucilio publicadas en "Cartas de un estoico" Seneca dice: "Hay más cosas que pueden asustarnos que aplastarnos; sufrimos más a menudo en la imaginación que en la realidad, algunas cosas nos atormentan más de lo que deberían; otros nos atormentan antes de que lleguen y otros nos atormentan cuando no deberían atormentarnos en absoluto. Tenemos el hábito de exagerar, imaginar o anticipar la tristeza ".
Séneca insiste sobre el hecho que la vida que conducimos a menudo caracterizada de la presencia constante de la negatividad, del período inminente que alguna cosa puede dañarnos o quitarnos un destello de felicidad; una condición, esta, que es compartida de todos los seres humanos.
Sèneca luego va más allá y clasifica aquellas que según su pensamiento son las preocupacioenes razonables y aquellas totalmente irracionales; según la opinión del gran filósofo romano, tendemos a consentir con demasiada frecuencia aquellas irracionales, y a tal propósito busca delinear una posible solución a las "demasiadas preocupaciones: La verdadera felicidad es disfutar el presente sin depender ansiosamente del futuro, no divertirse con esperanzas o miedos, sino descansar tranquilamente, como quien no desea nada. Las más grandes bendiciones de la humanidad están adentro de nosotros y estan a la portada nuestra. Un hombre sabio es feliz de su suerte, cualquiera ella sea, sin desear aquello que no tiene".
El secreto de Séneca, pero que deberíamos tener en cuenta cada día de nuestra vida, es aquel de vivir aquí y ahora, en el presente, lejos de cada tipo de preocupaciones por venir. Cualquier tipo de futuro nos espere, lo sabremos afrontar mejor si aprendiéseos la virtud de la resiliencia, de aprender a ser fuertes y de apreciar todo lo mejor que nos ocurre propio ahora, aquí y ahora!
Fuentes:
