Estos 10 signos de naturaleza chamánica te revelarán si eres un sanador

En las culturas antiguas y tribales lo chamánico recubría un rol particularmente importante, como puente entre la realidad terrena y ultraterrena, con tareas de guía y de sanación. Individuos parecidos nacen en cada generación y a menudo son obligados a dedicarse a profesiones médicas o a dedicarse al prójimo. Aquellos que no siguen este instinto se vuelven infeices porque no realizan su naturaleza. Aquí algunos signos que pueden revelar la "naturaleza chamánica".

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• Soñar en modo vívido. La dimensión onírica es el modo en que el mundo del invisible entre en contacto con lo tangible. Prestar atención a aquello que se sueña, a imágenes recurrentes, figuras o animales totem, puede ayudar a comprender el propio camino.
• Descubrir capacidad parecida a "superpoderes". Está quien logra de verdad a comunicar telepaticamente con los animales o a dar alivio al dolor de los otros solo con el toque de las manos. Estas son manifestaciones de la propia naturaleza chamánica. 
• Poseer sentidos particularmente agudos. Un chamán tiene olfato, vista, gusto, tacto y oido amplificado, porque aquello les conciente de ir más allá la percepción normal de sus semejantes.
• Experimenta la vocación de calmar los males del mundo. Muchos chamanes se convierten por instinto en médicos, veterinarios o sacerdotes, la razón está en su naturaleza curativa que se manifiesta con el intento de aliviar el sufrimiento físico o espiritual.
• Sufrir del "mal del chamán". A menudo sucede que siente una incomodidad inexplicable que se manifiesta con síntomas físicos o psicológicos. Esto sucede porque la naturaleza chamánica no ha sido aceptada, es decir, cuando el individuo aún no ha respondido a la "llamada".

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• Sentir de tener un rol en el camino de toma de conciencia global. Desde hace tiempo se siente hablar de un proceso de cambio en el camino, pero algunos más que otros perciben de ser destinados a tener que dar una contribución activa volviéndose protagonistas.
• Haber vivido una experiencia de "iniciación". Eventos naturales o particulares casualidades en que un miembro de la tribu era involucrado, venían interpretados como signos de revelación de su naturaleza chamánica. Cualquier circunstancia traumática que ha señado la vida puede ser un "test" al cual se ha sometido para ser puesto a la prueba.
• Ser muy introvertidos. Un chamáa vive constantemente entre dos dimensiones, aquella de lo visible y de lo invisible. Este don se traduce en una mayor introspección y menor expansividad.
• Percibir la naturaleza como la propia casa. Los chamanes son canales de comunicación entre aquello que es humano y aquello que es salvaje, entonces tienen una conexión más potente cerca a los mares, montañas, bosques y animales.

Se necesita ser valiente y abrazar estos dones porque la historia enseña que la mayor parte de las personas teme aquello que es diferente y no comprende. Incluso tomar el camino por el cual se está destinado es el único modo para realizarse a si mismo!