Encuentra 2 perros abandonados pero ningún autobús quiere hacerlos subir: así recorre a pie 1.400 km para llevarselo a casa
Un viaje es un descubrimiento, de la cual se conoce la partida, pero no se sabe que cosa nos esperará al regreso: de hecho, en el mientras puede ocurrir de todo y se termina por volver a casa al menos un poco diferentes, y en el mejor de los casos, con algún amigo de más - uno de los tesoros más preciosos del viajar.
Es lo ocurrido a un joven chileno, Lucas Giménez, que - mochila en la espalda - partió con su novia, y ha hecho un regreso con dos nuevos y fieles amigos: los perros Pilsen y Serena.
Lucas y Sol han partido a la aventura, decididos a explorar las montañas y la Argentina, deseosos de descubrir nuevos horizontes y aque que sobre el camino, han encontrado nuevos amigos: dos perros abandonados, que han decidido de quedarse con ellos, bautizandolos Pilsen y Serena.
Sin embargo, después de este feliz encuentro, una serie de eventos desafortunados lograron obstaculizar el viaje: en primer lugar, como informó la hermana de Lucas, Agustina en las redes sociales, la joven pareja fue robada en Abra Pampa, en la provincia argentina de Jujuy
Cuando lograron comunicarse con las familias, el padre de Sol se fue en autobús a Jujuy para traerlos de vuelta. Sin embargo, los niños no habían previsto que el viaje con sus nuevos compañeros hubiera sido más complicado: de hecho, ninguna compañía de autobuses aceptó transportar animales.
Pero para los dos jóvenes era impensable abandonar a los dos amigos que viajaban: así que Lucas le dijo a Sol que regresara a casa en autobús con su padre, mientras que él haría el viaje de regreso a pie a Mendoza con Pilsen y Serena. Más de 1.400 km.
Como ha escrito luego Agustina "Mi hermano ha sido siempre así. Vivimos en una granja y tenemos muchos perros. Lucas es aficionado a ellos y no puede dejarlos".
Algunas personas se han ofrecido de darles un viaje largo por la calle; entre estos Ninos, una mujer los ha llevado a pocos kilometros de Tucuman y que ha afirmado "Lucas nos ha dicho que él y los perros estaban cansados. Así es que los hemos llevado en auto, y les hemos dado agua, biscochos y dinero", agregando que los perros eran dulcisimos y tranquilos, y que han quedado acurrucados sobre el asiento durante el viaje, sin ladrar ni agitarse.
Gracias a la ayuda de otras buenas personas, Lucas, Pilsen y Serena finalmente han vuelto a casa, donde han abrazado a Sol que los esperaba ansiosa y feliz.
Una historia de final feliz, de donde tomar inspiración - porque cuando se va de vacaciones, no solo los perros no deben ser abandonados, sino que están dispuestos a aceptar nuevos, según sea necesario.