Todos los peligros de la mordedura de la víbora: esto es lo que hay que hacer...y que cosa NO hacer en absoluto
Con la llegada de las bellas estaciones nos permiten de disfrutar a pleno de caminatas al aire abierto y paseos fuera de la puerta, donde quizás nos dedicamos mayormente a explorar aquella parte de la naturaleza sin contaminar que durante el resto del año nos parece tan distante. Que sea en montaña o en lugares más cálidos, la naturaleza nos regalará siempre emociones increíbles, pero, en ambos casos, debemos prestar atención en aquellas pequeñas trampas que podrían reservarnos. Con la llegada de los meses más cálidos, de hecho, se despiertan también las pequeñas serpientes, como las víboras, que deben saber reconocer y de la cual debemos aprender a defendernos.
Si queremos partir para una bella caminata en la montaña, debemos conocer los riesgos que signifícan sus mordeduras. Primero de todo, debemos estar vestidos adecuadamente para la excursión: calcetines largos y zapatos hasta la pantorrilla, además de pantalones rigurosamente largos. Durante la caminata es importante hacer ruido, quizás ayudándose con un bastón, para poder espantar eventuales víboras o animales potencialmente peligrosos para nosotros. Si buscan hongos, poner mucha atención donde ponen las manos, porque las víboras aman esconderse bajo las piedras.
¿Cómo reconocer la mordedura de una víbora? su mordedura es muy reconocible: está constituida de dos marcas distantes casi 6-8 mm, contorneadas de una sustancia transparente. El ataque de la víbora resulta más o menos grave según la edad de la persona, de su peso, de su estado de salud anterior a la mordida y también de la zona del cuerpo mordida.
¿Cuáles son los síntomas? los primeros síntomas aparecen de inmediato después de la mordida: inflamación, eritema, enrojecimiento y dolor localizado. Otros síntomas, más graves, pueden aparecer a distancia de 24 horas: náuseas, vómitos, dolores musculares, diarrea, mareos y baja de presión.
¿Qué hacer después de la mordedura? seguramente llamar a emergencias o dirigirse directamente a una guardia médica, en modo de obtener en el menor tiempo posible el debido tratamiento. Si la ayuda tuviera que hacerse esperar, la primera cosa que hay que hacer es liberar las articulaciones de la persona mordida de collares, anillos y pulseras, de modo tal que la inflamación provocada por el veneno no complique las cosas. Mantener la calma porque el aumento del latído cardíaco favorece un mayor flujo sanguíneo y de consecuencia, una más rápida difusión del veneno. La herida debe ser lavada en el exterior con agua oxigenada o al menos con agua simple, para eliminar el veneno en exceso.
¿Pero cuales son, en vez, las cosas que debemos absolutamente evitar en caso de mordedura de viboras?
-¡No desinfectar la herida con desinfectantes a base de alcohol o bebidas alcohólicas! El alcohol en contacto con el veneno podría provocar reacciones altamente tóxicas.
- No "retorcer" la herida para hacer salir el veneno.
-No chupar el veneno para que salga.
-No apretar la articulación mordida con un elástico o una cinta.
-No suministrar antídotos.
Estas prácticas pueden resultar altamente dañinas si se ponen en práctica por personas inexpertas. Aconsejamos entonces dirigirse de inmediato al personal de primeros auxilios.