Ingiere por equivocación una cerda del cepillo para barbacoa: ahora los médicos desaconsejan el uso en la casa
La casa es el lugar que desde siempre se asocia a la tranquilidad, a la seguridad, al refugio que da protección de todos los peligros del mundo exterior. No obstante ello, estadísticamente un porcentaje considerable de incidentes, incluso graves, suceden exactamente entre las paredes domésticas. Se trata de circunstancias a menudo imprevisibles, de peligros insidiosos, que están al acecho por un simple olvido o distracción. Entre estos el cepillo de parrilla.
via Atlantic News
Imgur / therealhoward
A vérsela mal por culpa de un objeto aparentemente así de innocuo ha sido Brady Tovell, de 10 años, que ha corrido un serio riesgo solo por una pequeña e impensable ligereza. Todo ha comenzado una noche cuando el joven se despertó con fuertes dolores abdominales. Desde el principio los padres pensaron que se trataba de una banal indigestión pero sus condiciones comenzaron rápidamente a empeorar, tanto que Brady comenzó a vomitar con frecuencia por las sucesivas 15 horas. Era evidente que se trataba de alguna cosa decididamente más seria.
Brady es llevado de inmediato al hospital con la sospecha que era una apendicitis. Una ecografía reveló líquido en el abdomen, así es que el equipo médico se preparó para una intervención de inspección y eventualmente para la extracción de la apéndice. La intervención termina con suceso, pero poco después de dos horas de sala operatoria a los padres se les comunica que en realidad a causar el problema había sido otra cosa. Un objeto de metal, desprendido probablemente del cepillo utilizado para la limpieza de la parrilla, había sido de modo inadvertido ingerido y le había dañado los intestinos.
Por suerte la intervención ha salido bien y Brady ha superado la fase crítica, si bien la fase de recuperación será mucho más que rápida o fácil. La madre y el padre del joven han compartido la historia en Facebook para alertar a todas las familias de una similar amenaza en acecho dentro de la casa. El episodio en realidad no es así de raro como podría parecer, porque diferentes personas llegan al hospital con síntomas parecidos o con dolores en la garganta, causados por la involuntaria ingestión de un idéntico cuerpo extraño.
Cuando un objeto metálico llega al aparato digestivo, las consecuencias son imprevisibles. En estos casos el diagnostico es muy complejo, entonces como advertencia¡es mucho mejor tirar el viejo cepillo de parrilla para utilizar sistemas alternativos y más seguros!
