La técnica de las 5 preguntas para enseñar a los niños a gestionar la rabia

por Patricia Zorzenon

24 Julio 2019

La técnica de las 5 preguntas para enseñar a los niños a gestionar la rabia
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La mayor parte de los padres lo sabe bien: sus hijos se enojan, a menudo sin motivos aparentes, dando lugar a momentos de verdadero y propio caos. Del resto como los adultos, incluso los más pequeños pueden tener momentos en donde es difícil contener la ira. A diferencia de los grandes, sin embargo, no siempre están en grado de gestionarla y esto hace que se pueda convertir en algo incontrolable.

Sin pensar de contener la rabia de los hijos con los instrumentos con la cual se contendría la de los adultos, es oportuno tener en mente y probar a poner en práctica un juego útil, que puede ser resumido en cinco preguntas. Veamos como funciona.

via Psychology Today

Babyaimeesmom/Wikimedia

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Como todos los sentimientos que los seres humanos pruebn, también la rabia tiene un orígen suyo, un desarrollo suyo y una modalidad suya de progreso. Identificarla mejor es oportuno incluso para los más pequeños. Esto es lo que se le puede pedir al niño si está por enojarse o si está ya enojado, para ayudarlo a gestionar mejor su ira.

1. ¿Que cosa es la rabia?

Es importante preguntárselo para hacer reconocer las variadas emociones. Identificar la rabia con experiencias, acciones o eventos vividos es un primer paso útil para encuadrar el problema, así como lo es el hecho de probar a identificarse con sus sentimientos. 

2. ¿Que cosa me hace enojar?

Una vez identificada la rabia en cuanto emoción, se necesita entender que cosa es que lo hace sacar afuera. Por un niño, la lista puede ser infinita: desacuerdos con sus semejantes, reprimendas de los padres, juguetes rotos o sustraíos son motivos de frustraciones que van distinguirse de la vergüenza, celos y otros sentimientos.

3. ¿Que cosa noto en mi cuerpo cuando me enojo?

Es importante hacer reflexionar al niño sobre que cosa le sucede a su cuerpo en el momento antes que la rabia explote: así el pequeño estará en grado de entender que cosa está sucediendo y actuar a tiempo.

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Maxpixel

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4. ¿Que hago cuando me enojo?

Emociones y comportamientos son dos esferas distintas. Los niños no siempre logran dividirlas, per es fundamental que asocien determinados comportamientos "rabiosos" a los verdaderos sentimientos de ira que pruebn en aquellos instantes. Así, podrán entender si han traspasado ciertos límites, quizás actuando de manera violenta o gritando.

5. ¿Que puedo hacer cuando estoy enojado?

Una vez identificada la emoción, se necesita saber como gestionarla. En el momento en que la ira está explotando, es importante alejarse - incluso físicamente - de ella. Encontrar un lugar tranquilo y esperar que la rabia se haya aplacado es ya una primer estrategia. Respirar, buscar de relajarse y desarrollar actividades que hagan viajar la cabeza a otro lugar por un poco de tiempo son otras cosas que podemos sugerir a los niños.

VanessaQ/Wikimedia

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Obviamente, todas estas técnicas y estrategias van relacionadas a cada simple caso, más allá de la edad del niño. Las diferencias anagráficas, en los primeros años de vida de los pequeños, son fundamentales porqué cambian totalmente el modo de reaccionar y gestionar sus emociones.

Para los padres, entonces, es útil recordar de no reprimir en principio la rabia de los niños. En aquel momento, están manifestando una emoción y es lícito que lo hagan. Aquello a la cual se necesita actuar es el comportamiento que adoptan durante su ira. Si se prueba de gritar o comportarse en modo más violento de ellos, no se obtendrán grandes resultados.

Si un padre se enoja o grita cada vez que el hijo hace cualquier cosa que no le gusta, el niño entenderá que actuar así es absolutamente normal y lo hará apenas sea posible. Propio como escribir o leer, enseñar a los pequeños la gestión de las emociones es un paso fundamental para educar mejor a los hijos, sobre todo hasta que crezcan como personas tranquilas y razonables.

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