Fuego de San Antonio, el herpes que se activa con el estrés: causa y síntomas de este doloroso eritema
El estrés se comporta a menudo como un potente activador de las más variadas patologías. ¿Es posible que dependa siempre todo del estrés? No todo, seguramente, pero el sobreesfuerzo físico y psicológico es un factor que afecta directamente el sistema inmunitario, bajando las defensas y aumentando el riesgo de contraer alguna enfermedad. El Herpes Zoster, comúnmente llamado Fuego de San Antonio, es una de aquellas enfermedades infecciosas, bastante comunes, que podrían aparecer en nuestro organismo si continuamos a vivir con altos niveles de estrés.
via msdmanuals.com
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El Herpes Zoster es provocado del mismo virus de la varicela, donde en general es contraída a una tierna edad. Una vez sanados de la varicela, el virus queda silencioso e inactivo por años en el interior de nuestro organismo, hasta cuando por algún motivo podría reactivarse bajo la forma de Herpes Zoster. Se trata de una infección viral que se manifiesta con una erupción cutánea muy dolorosa y fastidiosa, que podría aparecer en cualquier parte del cuerpo. Mientras la varicela es típica de los niños, el Fuego de San Antonio afecta mayormente a los adultos, sobre todo a los ancianos. Los niños no son igualmente inmunes a la enfermedad y es siempre bueno controlar eventuales apariciones de burbujas y enrojecimiento. Potencialmente cualquiera puede contraer virus, pero las personas con un sistema inmunitario muy bajo están decididamente más en riesgo.
Si advierten ardor en un eritema que apenas acaba de aparecer, no dudar en contactar a vuestro médico y dermatólogo: reconocer inmediatamente el Zoster es fundamental, porque permite de proceder con la terapia entre las 24-72 horas de la aparición de las primeras burbujas, evitando de este modo fastidiosas complicaciones en las fases más agudas de la enfermedad. Es todavía más importante actuar puntualmente si las burbujas son concentradas cerca de los ojos: el herpes zoster, de hecho, puede causar el desprendimiento de la retina y llevar a la ceguez.
Generalmente las pequeñas vesículas quedan sobre el cuerpo por un período que va desde las 3 a las 5 semanas. El dolor y el sentido de ardor pueden igualmente durar mucho más. No olvidar que se trata de un virus: el Herpes Zoster es más bien contagioso.
Los síntomas que se advierten antes de contraer el virus son:
- cansancio extremo
- sensibilidad a la luz
- fiebre
- dolor de cabeza
- dolor, picazón y hormigueo durante dos o tres días antes que se desarrolle la erupción cutánea
- vesícula con líquido.
No subestimar los síntomas y la aparición de esta fastidiosa enfermedad, porque las consecuencias de un mal y atrazado diagnóstico podría ser más bien peligroso. Buscar de no estresarse demasiado y de dormir lo suficiente por las noches; humo y alcohol podría empeorar los síntomas del Zoster, entonces busquen de evitarlo. Dirigirse siempre a vuestro médico de cabecera y en este caso específico a un buen dermatólogo que solo bastará una mirada veloz para entender si se trata de Herpes Zoster o no.