Esta mujer había perdido su anillo de compromiso en el jardín: luego de 13 años lo encuentra sobre una zanahoria
Collen Daly pensó que aquella noche tenía ganas de preparar una buena ensalada, así es que salió a su viejo jardín a recoger las verduras. Aquel jardín tenía una bella historia a sus espaldas: por más de 100 años había quitado el hambre a la familia del marido de Colleen y ahora continuaba a servir con el mismo objetivo. El marido de la mujer había crecido en aquel jardín en donde su madre acostumbraba a recoger la ensalada. Una noche, igualmente, Colleen fué al jardín para aquella ensalada y noto alguna cosa extraña: ¡un anillo de oro encastrado en una zanahoria! Sin perder tiempo, la mujer mostró aquel anillo al marido, el cual reconoce inmediatamente a quién pertenecía.
via BBC
Trece años antes de este misterioso descubrimiento, en aquella propiedad habitaban Mary Grams y su marido Norman. Como es de tradición, también Mary recogía los productos de la huerta directamente en aquel jardín y una noche en que tenía la intención de comer una ensalada, ¡pierde su anillo de compromiso! No le contó a ninguno de este evento, tanto menos a su marido Norman que, seguramente , habría exagerado toda la historia: Mary tenía puesto ese anillo desde 1951, un año antes que los dos se casaran. Aquello que hace Mary en la época, fue simplemente ir a una joyería para comprar el anillo más económico que fuera. El marido, por lo que parece, no se dio cuenta de la diferencia.
Después de trece años, la anciana pareja se transfirió a otra casa, a Camrose, mientras el hijo Brian decide de tomar aquella casa con el jardín, junto a su mujer Colleen. La noche en que Colleen encontró el anillo, corre de inmediato a su marido, el cual no pierde tiempo y llamó de inmediato a la madre: ¿"Por casualidad has perdido un anillo de compromiso?. Aquella noche, no solo el jardín quitó el hambra a la familia Grams como había siempre hecho en los últimos 100 años, sino que restituyó un importantísimo recuerdo a Mary.
Luego de 60 años de matrimonio, aquel anillo que creía haber perdido, da testimonio de todo el amor que probaba por el marido, Norman, muerto lamentablemente seis años antes del hallazgo del anillo. "Si pudiera volver atrás creo que se lo habría dicho" ha confirmado Mary, pensando en el marido y en su sentido de humor.
Ahora, seguro, Mary no perderá nunca aquel preciosísimo recuerdo y cada vez que deba desarrollar alguna actividad al aire libre, lo pondrá en un lugar más seguro.