Esta asociación regala muñecas a los enfermos de Alzheimer, para reconfortarlos y ayudarlos a vivir mejor
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que compromete a la memoria, con efectos sobre el mecanismo cognitivo y sobre el comportamiento. Los pacientes vienen lentamente privados de su identidad y personalidad: una condición dramática para ellos mismos y al mismo tiempo difícil de sostener para quien les está al lado.
Se estima que sólo en los Estados Unidos, la enfermedad afecta casi a 6 millones de personas. Una asociación no profit, para dar una mano a quién lo sufre, se ha inventado una iniciativa que funciona como terapia de alivio.
La creadora del proyecto es Sandy Cambron, que es incluso fundadora de la asociación. Todo ha comenzado hace algunos años, cuando a su suegra, Pearl Walker, se le había diagnosticado esta forma de demencia progresiva. Así es que Sandy le regalo una muñeca y desde aquel momento la mujer comenzo a reaccionar hablando con el "bebé", llevandola consigo todo el tiempo, hasta dormirse junto a ella por la noche.
Cuando ha muerto, Sandy ha tenido la idea de abrir un grupo de apoyo, dando vida a Pearl's Memory Babies, un recuerdo y en honor de su suegra. Desde el 2018 la estructura es una asociación no profit en plena regla y ya ha distribuido más de 300 muñecas a otros tantos pacientes en numerosas casas de ancianos situadas en Kentucky y en Indiana.
Incluso habiendo todavía pareceres contrarios sobre el uso de esta forma de tratamiento, ha sido observado que dar en regalo las muñecas a los pacientes afectados de Alzheimer tiene notables efectos beneficiosos bajo el perfil de la interacción, de la reducción de la ansiedad y de la agresividad. Las personas se sienten como confortadas y viene reducito también el uso de fármacos psicotrópicos.
La razón podría ser en un encuentro del recuerdo natural del instinto paternal de los sujetos. en práctica las mujeres y los hombres que reciben las muñecas rememoran recuerdos agradables y se sienten como si estuvieran acudiendo a verdaderos bebés.
No hay datos ciertos sobre que cosa piensan o prueban las personas en presencia de estos bebés, incluso seguramente su comportamiento mejora y su permanencia resulta mucho más serena.
La iniciativa se ha alargado gracias a la contribución de una amiga de Sandy, Shannon Blair, que procedió a adquirir el material y difundió la noticia en sus redes sociales hasta que se volvió viral.
Gracias a las eficaces estrategias de comunicación y a la solidaridad de la gente, los sostenedores han recogido casi 15 mil dólares, para permitir a la asociación de continuar el propio trabajo.
No obstante el estado actual no sea todavía una cura o una terapia de recuperación y mucho menos de sanación del Alzheimer, los parientes de los pacientes están mucho más alivados al ver que sus seres queridos pueden al menos tener un poco de alivio en su condición.
Una pequeña chispa que alimenta la esperanza que quizás un día aquellas personas amadas pueden recordar sus vidas.
