En esta estación de autobús salvan los perros callejeros del frío con mantas y neumáticos
Cuando llega la estación invernal vivir por la calle se vuelve una prueba muy dura no solo para los seres humanos, sino también para los amigos de 4 patas.
No obstante estas criaturas sean dotadas de pelo y tengan una temperatura corporal más alta, tienen igualmente necesidad de ponerse al reparo y de nutrirse adecuadamente para afrontar el clima más rígido a las intemperies. Por suerte cada tanto hay quien decide de hacer la propia parte, como atestigua el episodio que estamos por contarles.
En la ciudad de Barreirinha, en Brasil, los empleados de la estación del autobús se activaron para salvar la vida de algunos perros sedentarios sin techo que se encontraban en el barrio. Conscientes del hecho que al bajar las temperaturas pueden arriesgar el congelamiento, el grupo de voluntarios ha realizado pequeños refugios utilizando mantas y neumáticos.
Para garantizar a los animales un mínimo de sustento, los empleados de la terminal van a menudo por todos lados llevándoles de comer y de beber, asegurándose que estén bien y que no tengan necesidad de ayuda.
Los cachorros ya se han vuelto practicamente las mascotas, tanto que se les han consignado nombres: Max, Pitoco y Zaino. La notable iniciativa ha sido documentada con las imágenes sobre Facebook, recibiendo muchísimos comentarios positivos y compartidos de personas que los han felicitado por la estupenda demostración de solidaridad.
La página de la red social creada por los empleados de la estación del autobús es un modo para difundir un mensaje de sensibilización hacia los animales que no tienen una casa ni alguno que los adopte para cuidarlos.
Han sido incluidas también indicaciones sobre que cosa hacer para dar la propia contribución, si se encuentran perros callejeros necesitados de ayuda. Se exhortan a las personas a contactar a las autoridades locales para salvaguardarlos y a la protección de la especie canina a unirse a ellos haciendo voluntariado en las estructuras dedicadas especialmente.
Si no se tiene la posibilidad de dar directamente hospitalidad a estas criaturas, puede ser útil también solo con llevarles comida para concentirles de mantener las fuerzas y de soportar mejor el frío. Después de todo, para salvar de verdad la vida de estos pequeños basta solo un poco de amor.