Un gato atrapado en un pelaje pesadísimo es esquilado por voluntarios de un refugio
Trabajar con los animales puede parecer a primera vista muy tentador. Acudir cachorros, cepillar gatos, al máximo limpiar sus recintos...¡visto desde el exterior parece de verdad un trabajo poco cansador! Inclusive, cualquiera que haya tenido experiencias en una perrera o en un refugio les podrá confirmar que sirve de verdad mucha pasión para resistir día tras día porque la crueldad o la negligencia de los hombres terminan a menudo por crear situaciones críticas, a la cual se es llamado a poner remedio. Como en el caso de este pobre animal, que un día ha sido tirado delante al Douglas County Animal Care & Services en Nevada: cuando lo han visto, ¡los empleados no sabían ni siquiera que cosa era!
No es raro que alguno deje durante la noche a su animal cerca al refugio (muchas personas lo consideran como objetos de la cual deshacerse a gusto) y Liz Begovich, que trabaja en el centro, puede decir de haberla visto de todos los colores. Incluso este caso ha quedado marcado en su mente: el animal había sido puesto por la fuerza en la jaula, porque era muy grande. Se trataba de una enorme pelota de pelo de color gris, así de tanto que era imposible distinguir el hocico.
Liz al principio penso que se trataba de un perro y probó moverlo para entender. Repentinamente el animal levanto la cabeza, revelando sus estupendos ojos azules de felino. ¡Liz no había visto jamás un gato en esas condiciones!
Su pelo había crecido desmedidamente, escabulliéndose y recogiendo basura alrededor. Sus condiciones eran tan desastrosas que resultó clara la necesidad de un tratamiento profundo.
El gato fue llevado al veterinario y sedado, para permitir sacar la cantidad de pelo tan espeso. ¡Al final de la operación el pelo llenaba una bolsa entera de basura, y pesaba más de 10 kilos! Una carga imposible de llevar para el pobre gato.
Después del cambio de imagen, el animal mostró su verdadero rostro de bellísimo gato color ceniza. En aquel momento fue claro para todos cual era la raíz del problema.
El animal estaba claramente en sobrepeso. Esta condición impedía al gato de limpiarse adecuadamente y faciliaba la creación de nudos en el pelo. Estos nudos hacían disminuir posteriormente sus movimientos, haciéndolo engordar más tarde. Además, un círculo vicioso en donde el animal engorda siempre más y el pelo está fuera de control. ¡Todas las condiciones a la cual un humano atento habría podido muy bien poner remedio!
Fue llamado Bob Marley ( asi lo han bautizado por causa de los "cabellos" que tenía antes) había sufrido meses, quizás años de total negligencia. Probablemente lo habían nutrido con alimento equivocado sin nunca cuidar de su salud y del estado de su pelo.
Por suerte, gracias a Liz y a la asociación Douglas County Animal Care & Services, hoy ha encontrado una familia que lo ama. Ahora está haciendo un régimen alimenticio y ha vuelto a moverse con libertad luego de haberse liberado de su prision de pelos...y ¡de seguro vivirá los próximos años rodeado de los cuidados que merece!
