Este niño autista tiene una crisis mientras espera el autobús: el asistente lo calma tirándose al piso con él
Hay días torcidos y momentos en que se pierde la paciencia o no se tiene ganas de hacer nada, es la vida que nos pone obstáculos cotidianos para superar y que a menudo, nos dan fastidio. Si piensan que la paciencia de una persona adulta viene puesta a dura prueba cuando espera el autobús o la metropolitana en la hora de punta, entonces piensen que es lo que debe haber sentido este niño de 8 años, LJ, afectado de autismo y también de síndrome de down, en el momento en que su autobús no llegaba. LJ ha tenido una de sus crisis, pero por suerte, el asistente del director estaba allí para consolarlo.
LJ es un pequeño y simpático estudiante de tercer grado de Garfield Elementary en Marion, Ohio (USA). Su madre, Steph Compton, ha escrito en una publicación en Facebook que continúa a llevar a su hijo a Garfield aunque ya viven en la otra parte de la ciudad; esta elección es debido al abrumador apoyo que ya sea ella que LJ, han recibido de los profesores y del personal de la escuela.
Un evento, en particular, entre LJ y el nuevo asistente del director, el señor Smith, muestra cuanto el equipo de la escuela está dispuesto a estar detrás de los propios estudiantes y a apoyarlos incluso en los días más difíciles. No obstante LJ sea un niño alegre y siempre sonriente, aquella mañana, evidentemente, no soportaba más de esperar el autobús y se ha tirado al piso, en uno de sus ataques. Ha sido en aquel momento que el señor Smith ha intervenido, tirándose al piso junto a él y reforzando la relación de confianza con el pequeño LJ.
Amber Mckinniss, una estudiante que ayuda al personal de la escuela, ha registrado la escena con una fotografía, que inmediatamente ha enviado a la mamá del niño. No podía no dejar de sacar esa foto: "¡Ha sido la cosa más increíble que haya jamás visto!" ha declarado, "nuestros corazones se derritieron y LJ se ha divertido". Steph Compton se ha sentido de inmediato aliviada por aquella foto, sabiendo que el personal calificado estaba apoyando y cuidando de su hijo. Este momento tan esperado, para esta mamá prueba que la Garden es de verdad la mejor escuela para el hijo y sus necesidades.
Una escena bellísima, que da testimonio como en el mundo hay todavía quién se apasiona del propio trabajo y entiende hacerlo del mejor modo posible.