Un sacerdote rehusa de bautizar a esta neonata porque cree que su lunar es contagioso
Un nevo melanocítico congénito, mejor conocido con el nombre de nevo, es un signo que muchas personas pueden tener desde el nacimiento y donde las dimensiones varían de pocos milímetros y grandes extensiones del cuerpo. Los nevos gigantes, que tienen forma grandes y raras y pueden cubrir gran parte del cuerpo, son raros y se verifican solo en 1 sobre 20.000 nacimientos; en la mayor parte de los casos, los nevos no causan problemas de salud y no requieren un tratamiento, también pueden causar algún malestar a aquellos que lo tienen.
via Daily Mail
Este ha sido el caso de Vika, una niña nacida en Rusia, que ha venido al mundo con un emorme nevo que cubría el 80% de su cuerpo y ello ha causado algunos problemas en el momento en que la pequeña debía ser bautizada. María Khvostantseva, madre de la niña, ha revelado que un sacerdote local le ha dicho que simplemente no habría permitido a la pequeña Vika de participar en el bautismo de grupo con otros recién nacidos.
Para justificarse, el saerdote ha explicado que no sabía si el nevo era contagioso o si otros padres habrían estado molestos por la presencia de la niña. Además, según la declaración de la mamá, el hombre se ofreció de bautizar a la pequeña individualmente, pero este "privilegio" habría costado casi 63 dólares para su familia...¡un comportamiento inaceptable para un sacerdote según las declaraciones de la administración local y de la comunidad!
Desafortunadamente, el comportamiento discriminatorio del sacerdote no es el primer obstáculo que la pequeña Vika debe afrontar. En efecto, los lunares de grandes dimensiones que cubren el cuerpo podrían transformarse en el futuro en melanomas, graves tumores de la piel. Por este motivo, la familia de Vika está recogiendo fondos para prevenir la enfermedad y ofrecer a su niña una infancia feliz y sana.
Todo ello es injusto para la pequeña niña recién nacida y es todavía mucho más injusto que la ciega ignorancia de la sociedad sea la causa de tanto disgusto para la familia de Vika, a la que le deseamos lo mejor ¡y un futuro radiante!
