La mamá de un niño autista descubre a través de Whatsapp que su hijo ha sido excluído de la actuación de Navidad
¿Que efecto les haría descubrir que desde un grupo de Whatsapp vuestro hijo de 5 años, afectado de autismo, ha sido excluído del acto escolar de Navidad? El disgusto que debe haber sentido esta mamá, que además de todo había pagado la cuota para comprar dulces y hacer pequeños regalos al personal escolar, debe haber sido inmenso. Su hijo está afectado de hiperactividad regresiva con retraso cognitivo y síndrome de autismo (las investigaciones médicas aún están en curso): a diferencia de los otros niños, no habla y no logra estar quieto en la fila. En vez de involucrarlo y buscar de hacerlo integrar, las maestras de esta escuela de Nápoles, en Italia, han preferido excluirlo.
via Ansa
Lo ha descubierto en los mensajes de un grupo de Whatsapp, que su hijo no habría participado en el acto de Navidad y que la maestra se habría reservado la elección de incluirlo o no, en la representación solo después de un enfrentamiento con ella.
"Sé que mi pequeño no habría participado, ha declarado en lágrimas la madre, sé que no habla y que no logra estar en la fila, no hay necesidad que la maestra me lo marque, pero para mi era importante también solo ver su nombre en aquella lista y verlo aquel día allí, saltando y divertirse a su modo, a ver aquella sonrisa suya dulce, sueños rotos de quien lo ha marginado en vez de integrarlo".
Palabras que hacen mal y que esperamos lleguen derecho al corazón de quien no ha entendido todavía que ser maestra y enseñar, significa también desarrollar un trabajo basado sobre la inclusión y la integración.