Este hombre ha salvado un cachorro de lobo y lo ha criado como un animal doméstico
Adoptar un lobo no es exactamente como adoptar un perro, pero este hombre no ha podido prescindir de encontrarse con un cachorro de lobo de pocas semanas que cuidar. No obstante el lobo no sea un animal doméstico y sea considerado más bien peligroso, Ivan Lebedev no lo ha pensado dos veces en adoptar un cachorro de 3 semanas. Era el 8 de mayo del 2017, en la región de Astrakhan (Russi), cuando algunos agricultores han encontrado cachorros de lobo y por causa de las peligrosidades de estos animales, querían deshacerse de él. Afortunadamente, Ivan, un terapista de 46 años que trabaja en un hogar de ancianos y discapacitados, ha comprado uno de estos cachorros de los campesinos, para salvarlo de su triste destino. Lo ha llamado Seryi, que en ruso significa "gris".
via Gray Wolf
En esta aventura, Ivan se ha hecho ayudar de su hija Alexandra, que ahora tiene 19 años y es un entrenador de perros. Por un poco, igualmente, quedaron en Astrachan, pero luego se transfirieron a Volgograd, donde actualmente viven.
Alexandra ha estudiado en la Universidad agraria y en la Universidad de Volgograd.
Actalmente Seryl, el lobo gris, tiene dos años y medio y alto 70 cm y pesa casi 45 kg. Ivan nos ha dicho que su animal doméstico tiene necesidad de caminar mucho, independientemente de las temperaturas que están afuera, entonces, advierte, tener un lobo en casa es una tarea muy desafiante. Considerando que no tiene nunca tiempo libre pero que debe encontrarlo para hacerle hacer largos paseos.
Si bien la gente piensa que los lobos son animales muy salvajes, Ivan ha contado que su animal se comporta como cualquier otro perro. A menudo tiene miedo: de atravezar caminos muy largos y de encontrar cosas desconocidas en su camino, como cajas u otros objetos. Ivan no deja que los extraños se hagan fotos con Seryl porque lo asustan mucho y también porque no se trata de un animal de circo, es parte de la familia suya. Lo lleva de la correa, sin bozal cuando van a hacer sus paseos aislados.
Antes de la llegada de Seryl, Ivan tenía ya perros en casa: para Seryi, representan los miembros más ancianos de su nueva manada. Como cada otro perro, Seryl muerde, pero solo cuando está estresado o aburrido. Cuando van a hacer los paseos, el lobo va de acuerdo con otros perros de su tamaño o similares, pero ignora a los más pequeños.
Si bien Seryl es un animal doméstico un poco exigente, sabe bien que es Ivan a controlar: es él el lider de la manada. Su hija Alexandra, por ejemplo, no logra a suministrarle medicinas o a llevarlo de paseo como hace su padre.
Lo alimentan cotidianamente con carne o pollo. Come casi 1,2 kg de proteínas al día, pero puede comer también verduras, fruta o bayas. De tanto en tanto, le dan también biscohos, nueces y miel para integrar su dieta.
Los lobos son animales muy inteligentes y en todo este tiempo, Ivan ha visto a su Seryi cuidar de los otros dos perros y también de su hija; logra abrir las ventanas e incluso encender las luces en la casa.
Para quién sueña de tener un lobo como animal doméstico; Ivan tiene algún consejo: no adopten JAMÁS uno. No lo hagan. Un lobo es un desafío, que roba mucho tiempo y energía y no es fácil de tratar. Pero si, por algún absurdo motivo, encuentran uno en casa, pasen mucho tiempo juntos para crear una relación sólida; duerman juntos, hagan paseos, asegurense de ser los únicos que le dan de comer y busquen de tenerlo lejos de las otras personas, para no tener problemas.