Este niño de 4 años nacido con medio corazón ha entregado sus regalos de Navidad a los niños necesitados
Cuando un niño nace con una malformación o un grave problema de salud, seguro que los padres saben ya que su vida no podrá jamás ser igual en todo y por todo a aquella de tantos compañeros. Las complicaciones y las dificultades de afrontar son muchas y se necesita muchísimo coraje, ya sea de parte del pequeño que de su familia, para ir adelante, luchando para vivir día tras día.
Lo sabe bien Elliott Wyche, un niño de 4 años de Arlington, Texas: un pequeño hombre con un corazón de verdad enorme. Tan grande de hacerlo un verdadero y propio ejemplo para todos.
via Today
El corazón de Elliott, en realidad, si nos detuviéramos sobre las dimensiones reales, es más pequeño de aquel de un niño de su edad. Por la exactitud, es la mitad, a causa del síndrome del corazón hipoplásico, una grave patología que lo ha hecho nacer exactamente con medio corazón, dado que limita el desarrollo del lado izquierdo del órgano.
Del nacimiento, el niño ha tenido que afrontar unas tres intervenciones a corazón abierto, pero todo ello no le ha impedido de seguir adelante y demostrar siempre de tener una enorme fuerza de voluntad, incluso en las circunstancias más adversas. Pero Elliott, además de haberse dado coraje a si mismo y a sus padres, ha logrado también dar esperanza y felicidad a tantos de sus pares que tienen necesidad.
Con el lema "medio corazón, doble pelea", la página de Facebook administrada por los padres ha siempre estado inundada de seguidores, mensajes de acercamiento y estima frente al niño. Y en ocasión de Navidad, para Elliott no han faltado los regalos de muchas personas que siguen su batalla cotidiana contra la enfermedad. Las docenas de regalos recibidos por el niño, sin embargo, han sido reutilizadas de manera de verdad maravillosa.
El pequeño ha decidido que a su vez habría donado los regalos a los niños necesitados. Gracias al programa de Santa Cops del Departamento de policía de su ciudad, Elliott ha estado entusiasmado de recibir a los agentes de policía que han recogido sus juguetes para luego entregarlos a los niños menos afortunados. Si bien ha sido fácil es tambien comprensible, para el niño, tener todo para él, visto incluso las dificultades de su vida y en vez no ha sido así.
El niño ha logrado hacer el bien a pesar de no encontrarse en una condición normal. Tanto ha sido el aprecio de los agentes de policía, que los mismos han decidido de hacerle dar un paseo sobre el camión de la escuadra de SWAT, haciendole poner a Elliott una gorra de la Policía mientas jugaba con un robot a control remoto.
Si un niño con problemas de salud así tan serios, logra cumplir un gesto tan ejemplar para hacer sentir su acercamiento hacia los demás, significa que estamos frente a una persona simplemente extraordinaria. Este pequeño héroe les ha enseñado a todos que no obstante las adversidades de la vida, es siempre posible encontrar coraje, tener fuerza e incluso una ayuda concreta a quien menos tiene. Otra que pequeño: ¡lo de Elliott es un corazón de verdad muy, muy grande!