El perro no sabe que el patrón falleció y lo espera por días frente al hospital en donde estaba internado
Cualquiera que tenga un perro sabe bien que estos animales están dispuestos a hacer enormes sacrificios con tal de ayudar y proteger a los propios patrones. Su dedicación es tan fuerte que a veces supera los límites de la autoconservación y los obliga a poner en segundo lugar también su misma vida para asegurar el bienestar de los humanos.
La misma fidelidad total la encontramos en el Labrador Totó,protagonista de esta historia conmovedora pero también angustiante ambientada en Argentina.
Enfoque Informativo Guerrero/Facebook
El perro Totó fue llevado un día al hospital Pablo Soria en la ciudad de San Salvador de Jujuy para consolar y saludar a su humano, internado en aquella estructura. No pasó mucho tiempo antes que el destino se cumpliera: el patrón de Totó fallece y con esto resulta que desde el momento de su desaparición, los parientes se desentienden totalmente del animal.
En los días siguientes el personal del hospital comenzó a notar la presencia de Totó en las cercanías del edificio: quedando totalmente solo, el animal volvió al lugar donde por última vez había visto a su amado patrón, probablemente esperando en volverlo a ver de un momento a otro.
La historia del pobre Labrador Totó ha conmovido a muchas personas, que se han luego activado para buscar una solución: diferentes asociaciones han tomado a cargo la cuestión, buscando una familia que pudiera acogerlo y darle el amor que merece. Pero un requisito importante para adoptarlo es tener una valla muy alta: todos, de hecho, están seguros que en la primera ocasión, Totó volvería corriendo frente al hospital para esperar a su compañero de vida, ya muy lejos.
