La mujer le encarga de retirar el perro de la peluquería: cuando vuelve se da cuenta de haber tomado el equivocado

Se necesita ser sinceros: no siempre, entre cónyuges, los maridos están bien dispuestos cuando las mujeres les  confían a ellos sus tareas domésticas o quizás las ven como aburridas y repetitivas. Ocurre a menudo que, no obstante las mejores intenciones, un marido se distraiga o lleva a término un servicio a su modo, sin pensar demasiado en las consecuencias de aquello que está haciendo. Muchas mujeres dirán que se trata de una característica típicamente masculina, pero en el fondo ¿no es ni siquiera esta variante que hace interesantes las relaciones?

Probablemente si lo es quizás incluso CoCo, la mujer de Rudy Salazar, cuando ha visto volver a casa a su marido con una sorpresa totalmente inesperada.

via CoCo Salazar

La tarea era simple, en el fondo: ir a buscar a BooBear, el adorable perro blanco de la familia, que estaba en la peluquería donde la mujer la había dejado algunas horas antes.

Hasta aquí todo bien, o casi. Porque cuando Rudy ha llegado del negocio de la peluquería para animales, diciendo que estaba allí por CoCo, refiriéndose obviamente a la mujer, se ha creado un poco de confusión. A estar haciendo el baño, de hecho, estaba entre los otros también un perrito de nombre CoCo, muy parecido a BooBear, el perro que Rudy habría debido regresar a la casa.

Así fue que al hombre se le ha entregado el perro equivocado, sin que en él se desatara un mínimo de sospecha. Una vez que volvió a su casa tranquilo y satisfecho por haber llevado a término su tarea, se ha encontrado de hecho delante al asombro de la mujer, que se dio cuenta de inmediato que el perro que Rudy tenía en brazos no era su Boobear. El momento del descubrimiento de la divertida equivocación ha sido registrado un video compartido luego sobre Facebook, que ha hecho el giro de la web, divirtiendo a muchos usuarios.

El cachorro "equivocado" ha sido de inmediato devuelto a la peluquería y CoCo ha podido volver a abrazar a su BooBear. En el fondo no ha sido su culpa de que Rudy y los dos perros sean realmente muy parecidos. Sin embargo, seguramente, una pizca de atención de más, de parte suya, ¡no habría seguramente estado de más!