Una hembra de orangután se ha acercado a una mujer que amamantaba a su hijo, identifiquémonos con ella

por Patricia Zorzenon

23 Enero 2020

Una hembra de orangután se ha acercado a una mujer que amamantaba a su hijo, identifiquémonos con ella
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Los orangutanes están entre los animales más increíbles que la naturaleza nos ha regalado. Se trata de primates tan parecidos al hombre que dan impresión. Su inteligencia, sus expresiones, su genética son parecidas a las nuestras en porcentajes elevadísimos. Lamentablemente, la población de estos grandes homínidos está amenazada con riesgo de extinción y es por esto que parece esencial garantizar una supervivencia lo mas posible lejos del peligro.

No obstante se trate de animales tendencialmente solitarios, los orangutanes logran instaurar relaciones fuertes y duraderas y en su organización, las relaciones con las madres tienen un valor importantísimo. El instinto materno es un sentimiento que para ellas es de verdad fundamental y logra llegar también más allá de su especie. Lo sabe bien Gemma Copeland, mujer que estaba con su hijo pequeño en Austria, en el zoológico de Schönbrunn en Viena y ha asistido a una escena que no olvidará muy fácilmente.

via Metro

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Pubblicato da Gemma Copeland su Giovedì 9 gennaio 2020

Durante la visita, su pequeño ha tenido hambre. Gemma, entonces,se ha sentado cerca del recinto donde viven los orangutanes para amamantarlo al seno. Ha sido a ese punto que ha sucedido algo de verdad tierno, mágico y fascinante. Una hembra de orangután se ha acercado al vidrio y comprendiendo que el humano que Gemma estaba amamantando era un "cachorro", se ha acercado a mirar la escena muy curiosa, con una expresión en el hocico que va solo observada para ser mejor comprendida.

Mirando a Gemma derecho a los ojos, la hembra de orangután ha quedado sentada con la mujer por casi media hora, levantando cada tanto el brazo como si quisiera tocar al pequeño humano que se estaba alimentando de la mamá y acariciando el vidrio que la separaba de él. Con un gesto totalmente natural e instintivo, es como si hubiera querido proteger y consolar a Gemma durante una actividad que ella misma ha reconocido como maternal.

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Este maravilloso animal ha demostrado aún una vez más que no cuentan las diferencias de especie, ni aquellas de raza: se puede siempre encontrar alguna cosa que une también las criaturas más diferentes entre si. El instinto materno es una entre estas: tener hijos, criarlos y protegerlos es una experiencia fantástica y para compartir cualquier cosa que sea de nuestra proveniencia. Seguramente, el mundo estaría en un lugar mejor si aprendiéramos alguna cosa animal como esta orangután...

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