Vale siempre la pena dejar de fumar: los beneficios para la salud de inmediato y a largo período son enormes
Fumar, es sabido,no ha hecho nunca bien a ninguno. Ya, incluso los fumadores más fervientes están en conocimiento de los graves riesgos que se corren a causa de este terrible vicio; no obstante para algunos, no es suficiente saber que sus pulmones muy pronto no soportarán el golpe, que su piel será amarillenta y envejecerá prematuramente y que incluso sus dientes serán marcados por cada cigarrillo fumado. Además, cada uno es responsable de las propias acciones. Lo importante es estar informados sobre aquello a la cual vamos a enfrentarnos. Fumar hace mal y lo sabemos todos- ¿pero saben que cosa le sucede al cuerpo cuando se deja con el vicio? Aquí a continuación hemos querido reportar algunos detalles de los increíbles beneficios como consecuencia en dejar de fumar.
via Healthline
Los efectos beneficiosos que derivan del dejar de fumar comienzan 20 minutos después de haber tomado esta importante decisión. Dejando de fumar, la presión sanguínea y el latido cardíaco disminuyen y vuelven a regularizarse. Después de 8-12 horas, el nivel de monóxido de carbono presente en la sangre vuelve a un nivel normal. Cuando la presencia en la sangre del monóxido de carbono comienza a disminuir hasta su completa desaparición, los niveles de oxígeno en la sangre vuelven a la normalidad. Después de haber transcurrido 24 horas enteras sin fumar ni siquiera un cigarrillo, probablemente, volverán a saborear el verdadero gusto de la comida e incluso tu olfato mejorará en consecuencia.
Después de dos semanas, y en las siguientes, la circulación ya habrá mejorado mucho y con ella, incluso la capacidad pulmonar. Según la universidad de Michigan, después de 2 semanas, la capacidad pulmonar aumenta del 30%. Después de 1 mes, la tos que los perseguía desde siempre ya habrá casi desaparecido del todo y también vuestro respiro corto habrá decididamente mejorado. Después de 3 meses, un ex-fumador aumentará su posibilidad de ser fértil y su niño correrá menos riesgo de nacer prematuro.
Después de un año de abstinencia, basta pensar que el riesgo de enfermedades coronarias se ha reducido respecto a aquel de un fumador. Te darás cuenta de la poca tos que tienes después de un año sin el humo y de cuanto tu respiración ha mejorado. Más se va adelante en los años sin fumar, más se disminuye y reduce el riesgo de contraer ACV, cáncer a los pulmmones, a la boca, a la garganta, al esófago, vejija y páncreas.
Vale siempre la pena dejar de fumar, vuestro cuerpo estará eternamente agradecido.