Cuando ha descubierto que su gato tenía un mejor amigo, esta mujer ha decidido de adoptarlo incluso a él
Dos amigos los reconoces de lejos, porque a mantenerlos juntos es una unión especial que vence cada desafío y dificultad. Un amigo es alguno con la cual poder reír en la vida, pero es también aquel que elige de quedarse al lado en el momento de necesidad. Es difícil vivir sin amigos, en cuanto el ser humano es por su naturaleza un "animal social", que tiende a agregarse con los otros individuos.
No es bien cierto si el mismo discurso puede valer también en el mundo animal, pero seguramente también perros y gatos se encariñan con los propios semejantes, especialmente después de haber compartido juntos una parte importante de la propia vida. Dwight y Conan, por ejemplo, son dos tiernos gatitos que, por 1 año, han estado siempre juntos, compartiendo aquello que podemos definir "una bellísima amistad". Lamentablemente, sus caminos se han repentinamente dividido y así también su amistad, porque Dwight ha sido transferido a otro refugio y sucesivamente adoptado. Por suerte, el final feliz no ha tardado en llegar .
Cuando Dwight ha llegado a un refugio de Kennebunk, en Maine (USA), estaba asustado y sin nadie de su parte. El gatito había vivido por 1 año en otro refugio, donde había estrechado una increíble amistad con otro gatito, Conan, también ellos huéspedes de la estructura para animales. Desde el primer día, entre los dos ha estallado una química especial, que los ha llevado a estar siempre juntos, cualquier actividad desarrollaran.
Después de un año de amistad, Dwight ha sido llevado a Maine, donde ha encontrado a su nueva "mamá", Megan Marsh. Marsh sabía incluso ella desde el primer momento que Dwight era el gato justo para ella. Después de años de conjeturas y dudas, finalmente se había decidido a adoptar uno. Marsh, igualmente, no estaba al tanto del pasado de Dwight y no tenía la mínima idea que Dwight tuviera un amigo especial en alguna parte.
"Swight es el gato más dulce que yo haya nunca visto" ha contado Marsh, preocupada antes de encontrarse con un animal desconfiado y sospechoso. Dwight, en cambio, se ha revelado ser el gato perfecto: ama los mimos y la sigue a cualquier lado en su departamento.
La historia de Dwight le fue más clara cuando una de las voluntarias del refugio la ha contactado para contarle de Conan, que quedó en el refugio, todavía en espera de ser adoptado. Con aquella telefonada, la voluntaria esperaba de reunir a los dos viejos amigos.
Marsh pensó un tiempo la posibilidad de adoptar otro gato, atemorizada del hecho que su departamento pudiera no ser suficientemente grande, pero luego toma su decisión.
Marsh ha decidido de adoptar también a Conan, convencida de hacer la cosa más justa por su animal doméstico. "¡Tiene sentido, aquellos dos eran los mejores amigos: habría sido una locura si no los hubiese hecho encontrar de nuevo!" ha dicho Marsh.
Una historia con final feliz, de hecho, en donde ha triunfado ciertamente la amistad.
