Una joven discapacitada no logra contener las lágrimas después de haber sido víctima de un episodio de bullying
No hay nada que hacer: los casos de bullying existen, y desgraciadamente, continuarán a existir si no se promueve una educación más atenta y "rígida" en familia y en la escuela. Cuando nos preguntamos cómo es posible que en el siglo 21 nos encontremos en tener que afrontar problemas como el racismo o el bullying, dos fenómenos a veces conectados entre una delgada línea roja, nos estamos preguntando ¿cómo es posible que en el mundo exista gente prácticamente sin corazón? Porque es de esto que se trata: cuando se golpea verbalmente o físicamente a un individuo "más débil", sólo se puede ser un ser sin corazón...y acompañados de una buena dosis de cobardía.
Kerry Arnold es la mamá de una pequeña discapacitada que ha estado puesta en la mira en la escuela - el bulliyng la ha atacado físicamente, dejándole evidentes marcas en su rostro y en los brazos. En un posteo desesperado, la mamá ha buscado de dar voz a su pequeña de 12 años, Aalyha.
Aalyha fué afectada del Síndrome de Angelman, una enfermedad genética que implica varias dolencias, entre las cuales ligadas al lenguaje. La dulce niña, de hecho, no se encuentra en grado de comunicar con palabras sus estados de ánimo o cualquier otra necesidad, pero lo que no significa que no pruebe alegrías, dolor o tristeza como todos nosotros.
También Kerry, como tantas otras madres, recientemente ha decidido de hacer un paso hacia adelante y compartir públicamente el episodio de bullying donde estaba involucrada su hija Aalyha y de dar voz a toda su tristeza y angustia, después de tal evento similar. La pequeña Aalyha frecuenta la escuela en Hamilton, su ciudad natal, que también atiende niños con necesidades especiales; dada sus condiciones, Aalyha resulta un objetivo fácil para los agresores de la escuela y es justo cuando en esta ocasión, la mamá ha querido expresar la gravedad de los hechos. Aalyha ha sido atacada por un compañero, que le ha dejado marcas evidentes en los brazos, espalda y rostro.
En el video, publicado por su madre, la pequeña logra apenas contener sus lágrimas. Kerry ha afirmado que es así como se siente su hija en un "típico día de escuela".
¿Es posible que la escuela (y la familia) hayan desgraciadamente fallado en reconocer y corregir ciertos comportamientos dañinos entre los muchachos de hoy? El bullying es un fenómeno inaceptable, que, desgraciadamente, se radica cada día más en este mundo que, gradualmente, está perdiendo cada gesto de amabilidad.