Un niño de 7 años decide de usar sus ahorros para ayudar a todos los ancianos del barrio y hacer las compras
La epidemia de Covid-19 en todo el mundo es una plaga con la cual debemos hacer las cuentas diariamente, esperando de poder volver a un cierto punto de "normalidad" lo antes posible. Mientras tanto, debemos estar en casa y hacer de modo que nuestros seres queridos más vulnerables estén al seguro. Cuando Cavanaugh Bell, un niño de 7 años, se ha dado cuenta que su dulce abuelita de 74 años estaba entre las "personas más en riesgo", de inmediato ha pensado de ayudarla yendo personalmente a hacerle las compras. La abuela, también su mejor amiga, no debía absolutamente ponerse en riesgo de enfermarse con el Coronavirus por hacer las compras. La idea del pequeño Cavanaugh, sin embargo, ha comenzado a galopar: el joven se ha dado cuenta que, exactamente como su abuela, hay muchísimos ancianos que no tienen ninguno que les haga los mandados. La solución para Cavanaugh era simple: ¡lo habría hecho él por ellas!
La mamá de Canavaugh ha visto la desesperación del hijo cuando se dio cuenta que había muchos otros ancianos, como su abuela, que tenían necesidad de ayuda. La madre, entonces, le ha preguntado si quería usar un poco del dinero de sus ahorros que tenía hasta el momento, entre regalo de Navidad y cumpleaños, para hacer alguna buena acción: "¿Cuánto quisieras utilizar, 50 o 100 dólares?". El intrépido niño ha respondido de querer utilizarlos todos: 600 dólares para ayudar a los ancianos de su barrio. En definitiva, a Cavanaugh no le ha disgustado para nada gastar sus ahorros por una causa justa.
"¡Quiero que sepan que en ellos, pienso yo!" ha dicho Cavanaugh
Con aquellos 600 dólares, el niño ha logrado confeccionar casi 100 paquetes llenos de comida para entregar a los ancianos del barrio. Con poco dinero que tenía Cavanaugh ha preferido ofrecer alguna comida caliente a quien no podía permitírselo. La buena noticia es que el gesto solidario de este valioso jovencito de 7 años no ha terminado aquí: muchos han venido a conocer de su iniciativa y han querido de inmediato participar. El resultado es que ahora Cavanaugh, siempre ayudado por la mamá, recibe varias donaciones que logra entregar en su barrio a quienes tienen necesidad. La idea es aquella de continuar ayudando a miles de personas hasta que la pandemia no termine...o al menos, hasta que no terminen el dinero.
¡Fantásticos!