Una abuela de 102 años se tira con el paracaídas por tercera vez y rompe el récord mundial
No es nunca demasiado tarde para vivir una aventura extraordinaria y fuera de lo común para sentir una vez más un escalofrío correr a lo largo de la espalda. Lo sabe muy bien la temeraria Irene O'Shea, que a la venerada edad de 100 años, por primera vez en su vida, ha querido sentir una emoción increíble: la de tirarse desde un paracaídas. Y lo ha hecho no una, sino más bien tres veces, rompiendo el récord absoluto de edad en skydiving en Australia, donde vive actualmente.
via 10 Daily
Irene O'Shea tiene un hijo, cinco nietos y 11 bisnietos; su hija menor, Shelagh ha muerto de una enfermedad motora neuronal a la edad de 67 años, entonces Irene ha querido recaudar fondos para la investigación sobre la enfermedad motora neuronal en su memoria. Quizás será porque en su vida siempre ha querido quitar aquel miedo y aquel trauma familiar que siempre la acompañó, pero Irene siempre ha sido una mujer deportista y mucho más joven de su edad.
A los 100 años, ha sido la mujer más anciana de Australia en saltar de un paracaídas, récord que al año siguiente ha querido superar; pero no le bastaba. Irene quería batir el récord mundial de skydiving. A la edad de 102 años ha batido el récord de Kenneth Meyer.
Sin embargo, el señor Meyer tenía 102 años y 172 días cuando ha batido el récord mundial de edad anagráfica de skydiving pero Irene, una mujer juvenil y curtida de experiencia anterior, ha decidido romper el récord: el 9 de enero del 2018, a la edad de 102 años y 192 días la abuelita ha desafiado la suerte y gracias al equipo australiano de SA Skydiving ha hecho historia.
No es nunca demasiado tarde para vivir una emoción única e irrepetible, aunque si es ultracentenaria: ¡esto, abuela Irene O'Shea lo sabe!