La mamá tiene Alzheimer y no puede salir: el hijo decide de "recrear" para ella el supermercado en su casa
La cuarentena y el distanciamiento social dentro de las propias paredes de casa puede ser, a la larga, un ritmo de vida negativo y de malas influencias para las personas más frágiles de nuestra sociedad: desde las personas más ancianas, los discapacitados, hasta a aquellas que sufren de alguna grave enfermedad. Pensemos por ejemplo en los ancianos que sufren de Alzheimer: para ellos, recordar las cosas y las personas a medida que la enfermedad progresa, puede ser de verdad invalidante.
via Daily Mail UK
Especialmente si pensamos que algunas de estas personas están viviendo también ellos el aislamiento social, sin nadie que a menudo pueda ayudarles a hacer las compras, comprar las medicinas o los bienes más esenciales. Por esto, Jason Van Genderen, junto a toda su familia, decidió en no abandonar a la madre de 87 años por su enfermedad de Alzheimer. A pesar que la mujer siempre tuvo dificultad para recordar las cosas, sabe igualmente que una de sus actividades frecuentes era la de ir a hacer las compras al supermercado.
Así, Jason decidió en "recrear" dentro de la casa un verdadero mostrador de negocio, con la mujer y los hijos que desempeñaban el papel de comerciantes y vendedores.
Jason afirmó: "Hemos estado aislados por cuatro semanas y la rutina de mi madre ha sido interrumpida. Buscar en entender lo que está sucediendo la está destruyendo, y una de las cosas con las que rompe con su rutina de la semana es ir de compras. No podemos llevarla al supermercado, entonces pensamos en abrir un negocio en la casa."
Por supuesto, es sólo una puesta en escena, pero es extremadamente importante, sobre todo para las personas más ancianas o aquellas afectadas por síndromes neurológicos como el Alzheimer, poder darle a ellos un sentido de no abandono, cercanía, contacto con la realidad, aunque si tal vez esto fuera de la casa, haya cambiado completamente.
Una charla o un paseo dentro de la casa serán muy útiles, tal vez pedir ayuda en actividades que no requieren mucho esfuerzo físico podría de hecho entretener a estas personas que tienen de verdad mucha necesidad en ser ayudados; lo importante es hacerles saber que son miembros importantes y útiles de nuestras familias, para mostrarles todo el amor que ellos merecen recibir.
El Alzheimer es sin dudas una enfermedad difícil de afrontar, pero si bien los pacientes pierden progresivamente muchos de sus recuerdos, con las sensaciones sin embargo pasa algo diferente. Es muy difícil para alguien olvidar el sentimiento de felicidad si lo sienten desde hace mucho tiempo y es justamente esto que habla de la historia de la mamá de 87 años de Jason...
Al final, el hermoso gesto que ha hecho Jason con toda su familia ha sido milagroso: tratar de hacer la cuarentena en casa más habitable y sin tantas preocupaciones, y al mismo tiempo regala un rayo de esperanza de normalidad a una persona querida en grandes dificultades físicas y mentales. ¡Felicitaciones por la bellísima idea, Jason!
