Coronavirus: se trepa todos los días a un árbol para recibir Wifi y tomar las clases de la universidad

por Patricia Zorzenon

24 Abril 2020

Coronavirus: se trepa todos los días a un árbol para recibir Wifi y tomar las clases de la universidad
Advertisement

El brote de la epidemia de Coronavirus en todo el mundo está generando algunas molestias en cada ámbito de nuestras vidas. Las escuelas y las universidades están cerradas en muchos países y la didáctica es a menudo "a distancia", o bien efectuada de manera online cotidianamente por los maestros que quieren llevar adelante el programa de estudio y para que los jóvenes no se retrasen. Enseñar a distancia no es fácil, pero es una solución que fue impuesta para superar las dificultades técnicas ligadas al trágico momento que estamos viviendo. En El Salvador, hay un joven muy pobre que a pesar de las adversidades, quiere seguir las lecciones online de cualquier modo. En la casa no tiene conexión a internet, entonces se trepa a un árbol cerca para poder tomar señal de Wifi.

via Youtube / elsalvadorcom

Youtube / elsalvadorcom

Youtube / elsalvadorcom

Se llama Alexander Contreras, tiene 20 años y a pesar que empezó la universidad hace muy poco, es ya el orgullo de sus padres, maestros y compañeros de clase. Alex vive en una casa muy humilde, junto a su familia, y sabe bien los esfuerzos que debe hacer su padre para garantizarle una educación: él no quiere desilucionarlo, y al mismo tiempo, quisiera realizar su sueño de convertirse en un periodista profesional. Así, cada día, no obstante no tenga Internet a disposición, se trepa a un árbol para poder tomar señal de Wifi y seguir las lecciones de su clase online.

Advertisement
Youtube / elsalvadorcom

Youtube / elsalvadorcom

Paraguas para protegerse del sol o de la lluvia, cuaderno para escribir los apuntes y celular en la mano para ver a su profesor explicar la lección del día. Obviamente, Alex no olvida de utilizar su máscara para protegerse él y a quien lo rodea por el riesgo de contraer el Covid-19. Sus lecciones comienzan a las 7 de la mañana y terminan cerca de las 12, a la hora del almuerzo; sus profesores y compañeros entienden perfectamente que, a veces, la señal no es excelente y Alex corre el riesgo de perderse momentos importantes, todos lo ayudan con muchas ganas enviándole el material y ayudándolo en su carrera.

La precariedad que vive este joven cada día es profundamente injusta, pero desde cuando ha estallido el Coronaviru también en su zona han sido obligados a tomar medidas similares, para asegurar un cierto grado de seguriad. ¡Alex de todos modos no se rinde y continúa estudiando para convertirse en un buen periodista!

Advertisement