Un viejo perro sordo y ciego protege a una niña de 3 años perdida en el bosque ayudando a los rescatistas a encontrarla
La inteligencia y la atención que un perro puede dedicarnos son cosas que no terminarán jamás de sorprendernos. Hay seguramente una razón seria y concreta si a menudo se los llama los mejores amigos del hombre. Estos animales, simplemente, tienen una increíble capacidad de "sintonizarse" con nosotros, de entender si nos encontramos en situaciones negativas y actuar en consecuencia.
Con los niños, sin embargo, su instinto protector se convierte en algo maravilloso: parece casi que a veces logran tomar el lugar de los padres, demostrando ser compañeros de juegos y leales protectores. El anciano perro, sordo y parcialmente ciego del que estamos por hablarles es una demostración perfecta. Max es un animal que ha desafiado sus límites para salvar la vida de una niña en peligro.
via ABC
Estamos en Australia, en Queensland. Aquí, en una extensa zona de bosques cerca de su casa, desapareció Aurora de manera imprevista, una niña de tan sólo 3 años. La situación parecía rápidamente difícil para los equipos de búsqueda que intervinieron en el lugar. El área donde la niña se había perdido se caracterizaba por pendientes pronunciadas, espesa vegetación y obstáculos naturales. Además de eso, el frío se hacía sentir, llovía y se acercaban las horas nocturnas.
Aurora, sin embargo, no estaba sola. Con ella estaba Max, su perro fiel. La niña, evidentemente, se había perdido con él y, en toda la noche, el perro permaneció junto a ella, manteniéndola al calor y segura mientras dormía. Luego de una noche entera de preocupación y búsquedas por parte de los socorristas y familiares, la abuela de Aurora encontró a Max, lo siguió y logró conducirla justamente donde se encontraba la niña.
La niña así fue salvada y afortunadamente para ella todo terminó de la mejor manera. Si su perro no hubiera estado allí es probable que no se hubiera salvado y esto es realmente increíble, si consideramos que este animal hizo todo lo posible para ayudarla, a pesar de la vejez y sus discapacidades físicas.
Max no ve bien y no escucha, pero no se hechó atrás cuando entendió que su amada pequeña humana se encontraba en peligro y que tenía que abrazar muy pronto a su familia. Un verdadero héroe de cuatro patas, que hasta recibió de la policía de Quuensalnd ¡el nombramiento de un perro policía honorario!