Esta mamá trabajó en el mercado de pescados por 12 horas al día para que su hijo estudie: ahora es médico
Un padre haría cualquier cosa por sus hijos, ni que pensar una mamá soltera por su único hijo hombre. Nanita Ronquillo, una mujer de 55 años, tiene un puesto de pescado en el mercado local de su ciudad, en Filipinas. Gana poco menos de 20 dólares al día y trabaja todos los días por más de 12 horas. ¿Su objetivo? Asegurarle a su hijo la educación justa: solamente con un buen nivel de educación se puede salir de la pobreza y tener la vida que merecemos. Nanita esto lo debe haber entendido bien, porque trabajó por mucho tiempo para poder darle a su hijo, John Nico Ronquillo, un similar objetivo.
via Youtube / GMA Public Affairs
Desde la mañana hasta la tarde noche, Nanita trabaja sin parar en el puesto de pescados para poder darle al hijo lo que se merece. Gracias a su determinación, John alcanzó su objetivo y cumplió también el deseo de su madre: convertirse en médico. Nanita tuvo una vida difícil y llena de sufrimientos, tuvo que dejar a su marido cuando descubrió que la traicionaba con otra mujer y que, ahora, también había construído una nueva familia; pero no ha renunciado a su hijo, es más, insistió para que pueda tener una mejor vida que la suya.
No obstante Nanita se despierta temprano y comienza a vender el pescado ya desde las 5 de la mañana, hasta la tarde noche, han habido momentos en su vida en donde John Nico ha tenido que interrumpir sus estudios y no pudo ir a la escuela, por el simple hecho que Nanita no lograba ganar dinero suficiente.
Por suerte, ahora, los grandes esfuerzos que esta mamá y su hijo han hecho en en transcurso de sus vidas han tenido su recompensa: John Nico se graduó en medicina, aunque un poco con atraso pero ahora es un joven médico.
