Una anciana construye un "zoológico" en el patio de su casa para devolverles la sonrisa a todos los que pasan
En tiempos de emergencia sanitaria, muchas personas pensaron de tomar la ocasión para hacer bien al prójimo (y en el fondo a sí mismos) con lindas y ejemplares acciones. A pesar de las dificultades y quizás también las condiciones económicas ya difíciles por la situación en el que el mundo se ha encontrado por causa del Coronavirus, podemos decir que, junto a quien se ha aprovechado de manera egoísta de la situación, hay quien también ha hecho algo maravilloso.
Justamente como Nancy, la mujer de 86 años estadounidense protagonista de la historia que estamos por contarles que, como muchas otras personas, ha recibido el subsidio del gobierno de USA por la emergencia. Esta generosa anciana no gastó su dinero para ella, sino que decidió hacer un pequeño regalo a quien pasara por delante de su casa.
via WJAR10
Muchas veces quizás no nos damos cuenta, pero una sonrisa recibida en el momento justo es realmente algo que puede lograr levantarnos la moral de una manera increíble. Seguramente, el momento que todo el mundo ha vivido por el Covid-19 no le hizo bien a la serenidad de las personas y esto Nancy lo entendió muy bien. Entonces, tomó el dinero que recibió y construyó un hermoso "zoológico" en su patio.
Escucharon bien: luego de haberse registrado en Amazon, la simpática viejita comenzó a comprar hermosas réplicas y peluches grandes (o casi) naturales de animales exóticos, que muchos de nosotros probablemente han visto en vivo solamente en un zoológico. Orangutanes, leones, simios, aves de presa, cebras, pinguinos y muchos otros: el patio que dá a la calle de Nancy se ha convertido en poco tiempo en una verdadera atracción.
En el gris y en la monotonía del ambiente de la ciudad, esta mujer logró darle un adorable toque de color y alegría. Sus "animales" están allí, sentados, acostados o de pie a la vista de las personas que pasan, que seguramente no escapan del espectáculo. Tanto es así que la iniciativa tomada por la anciana señora pronto dió de que hablar, cruzando las fronteras de los Estados Unidos.
"He vivido la segunda guerra mundial, ha contado Nancy a la WJAR-TV, ha sido dura pero no como lo que está sucediendo ahora: la gente camina por la calle y está triste y por esto decidí gastar el dinero del subsidio en los animales y estoy contenta".
Nancy, simple y con su gran corazón, está feliz de poder hacer feliz a los demás y esto, a decir verdad, es algo maravilloso. Niños y adultos, cuando pasan frente a su casa, aprovechan la situación para saludarla, llenándole el corazón de alegría. Después de todo, el cartel que ha colocado en el patio habla claro: "bienvenidos al zoológico", justamente para involucrar a todos a un ambiente simpático para pasar algún momento de alegría y despreocupación. Seguramente, cosas que todos necesitamos.