El jardín rechaza a una niña de 2 años con una malformación en el cráneo: "Asusta a los otros niños"
A pesar de las distintas características que nos distinguen a cada uno de nosotros, haciéndonos únicos, podemos afirmar con simpleza que todos los niños son iguales: uno de los deseos más grandes de estos niños es jugar con sus compañeros y vivir una infancia feliz y sin preocupaciones. Lamentablemente, parece que no todos los niños logran "ganarse" este derecho fundamental. Sofya Zakharova es una niña rusa de 2 años, nacida con una grave malformación de cráneo y con gran parte de los dedos de las manos y de los pies unidos. Los padres de Sofya quisieran solamente lo mejor para la pequeña pero, viviendo en un pequeño pueblo, tienen solamente una opción con lo que respecta a la elección de la guardería. Lamentablemente, la respuesta del instituto no fue positiva y Sofya no fue admitida.
via NTV.ru
El motivo principal de este rechazo reside en la malformación de Sofya, la guardería comunicó a los padres de la pequeña que "asustaría a los demás niños". Una respuesta que ha literalmente despedazado el corazón de la mamá y del papá de Sofya. No importa cuán amable o no haya sido la naturaleza, porque todos los niños son iguales y tienen los mismos deseos: Sofya se merece jugar como todos los demás porque es una niña alegre e inteligente.
Por suerte, una organización de la región, Rainbow Goodness, que se encarga de defender los derechos de los niños, ofreció su ayuda a los padres para tratar de que admitan a Sofya. A pesar de la intervención externa de una asociación y el uso de abogados, la guardería siguió manteniendo la misma pólítica: no admitiremos a Sofya hasta que no se someta a una intervención quirúrgica que la haga "igual" a los demás niños.
Los padres de Sofya, sin embargo, viven en condiciones de extrema pobreza, en un departamento sin agua corriente y sin gas. A pesar de todo, buscan de cualquier manera ofrecerle lo mejor a la niña. Afortunadamente, la asociación Rainbow Goodness ha logrado procurarles un departamento más digno a los padres de Sofya, con agua y calentadores en funcionamiento; también los funcionarios del gobierno visitaron a la familia y se comprometieron a asignarles un nuevo departamento. Por lo que respecta a Sofya, los psicólogos han rogado a la guardería que la admitan, también porque cuanto antes interactúe con otros niños, antes podrá aceptar su aspecto físico.
Para intentar mejorar la situación, el gobierno local también les procuró dinero para que Sofya se pueda operar y que pueda transformar su aspecto físico. De cualquier manera, saber que existen seres humanos que todavía no logran desvincular el juzgamiento de las apariencias, hace mal al corazón.
¡Deseamos un futuro lleno de esperanzas y de amor a la pequeña Sofya!