Marido y mujer se aprietan la mano por última vez luego de 62 años transcurridos juntos
Al día de hoy es raro encontrar dos personas que estén juntas para toda la vida. Es ya difícil que una pareja no se separe luego de 5 o 10 años; y mucho menos más allá. Sin embargo hay quienes, desafiando los años y las adversidades, superan todos los objetivos con ligereza y fidelidad inquebrantables.
Para estos individuos excepcionales, separarse es inconcebible. Entonces, cuando termina su tiempo sobre la tierra, los cuerpos exigen un último saludo, antes que sus almas se encuentren para siempre juntas.
University Hospital of Derby and Burton/Facebook
Esto es lo que les sucedió a John y Marjorie Wilson, una pareja del Reino Unido, de 92 y 88 años respectivamente. Los dos se casaron en 1958. En mayo del 2020 a él le diagnosticaron un cáncer terminal. Ha sido así necesario la hospitalización en el Queen's Hospital Burton. Su esposa ya estaba siendo tratada en la misma estructura sanitaria, pero está a punto de ser dada de alta. Considerando las condiciones del hombre, el personal médico se dió cuenta que probablemente los dos no se volverían a ver.
A pedido de Emma, la hermana de Marjorie, las camas de los cónyugues han sido colocadas en la misma habitación y colocados uno al lado del otro. Los dejaron solos por un tiempo, así John tenía la posibilidad de decirle adiós a su adorada mujer, sosteniendo su mano por última vez.
University Hospital of Derby and Burton/Facebook
Emma, no sin esfuerzo, tuvo la rapidez de sacarles una foto de la escena para compartirla con la familia. John lamentablemente falleció el 15 de Junio en su casa. El hijo Kurt escribió una emocionante carta a los trabajadores del hospital, agradeciéndoles a todos por la gran disponibilidad y humanidad demostrada a sus padres.
La emocionante imagen ha sido luego publicada en internet. En aquella última mirada el hombre parece casi decir "amor mío yo me tengo que ir, tu quédate todavía un poco más, cuando quieras me encontrarás esperándote". Mirándolos es difícil lograr contener las lágrimas. Aún así le decimos a esta pareja que no se ha tratado de un adiós, sino solamente de un hasta luego.