Un policía consuela a un niño de 4 años después de un accidente de tránsito teniéndolo aferrado con él
Un agente de policía de Ecuador rápidamente ha dado la vuelta al mundo gracias a un gesto verdaderamente humano y generoso que tuvo lugar al final de un accidente de tránsito que ocurrió en una vía principal de la capital de la nación sudamericana, Quito. Ramón Salazar, policía de 35 años, ha consolado de manera muy tierna a un niño de 4 años que lloraba desconsoladamente después de una accidente de tránsito. Las imágenes de inmediato se volvieron virales.
via El Comercio
"Me di cuenta del accidente y he visto a una señora que tenía necesidad de ayuda para salir del auto, volví con mi equipo de primeros auxilios, pero de repente he sentido el grito del niño que ha llamado con fuerza toda mi atención", ha contado Ramón a los medios. Cuando el hombre ve que la señora había sido ayudada, el policía se lanzó instintivamente para ver que cosa podía hacer por el pequeño Dilan que lloraba; lamentablemente, el pequeño era extranjero y no hablaba español, pero cuando se habla de empatía, solidaridad y sensibilidad, no existen barreras y se habla solo una lengua: la de la solidaridad.
"Lo envolví en la manta alrededor mío, lo he abrazado e intenté de consolarlo". No hubo otra cosa que pudiera hacer Ramón en aquel momento, sino la de calmar al niño que estaba pidiendo ayuda. Ramón luego ha sacado afuera el teléfono y le ha venido en mente una cosa que habría hecho como si fuera su hijo.
Para Ramón, que tiene un hijo tambíen de 4 años y desde hace 15 trabaja en la Policía de Quito, ha sido como ayudar a su propia criatura: en el momento del accidente, lo ha tenido aferrado y lo distrajo con un video divertido sobre su propio celular. El gesto obviamente no ha pasado inadvertido, las imágenes han hecho rápidamente la vuelta por la web y finalmente también el mismo Cuerpo de Policía de la ciudad oficialmente ha felicitado a Ramón por su simple pero maravilloso gesto.
¡Felicitaciones Ramón por haber consolado a este niño en un momento verdaderamente delicado!
