Una niña es arrastrada mar adentro en su unicornio inflable: rescatada por un ferry
Hay situaciones que, a simple vista, parecen del todo normales y sobre las cuales pensamos que no pueda suceder nada de extraño o peligroso. Piensen por ejemplo en un tranquilo día en la playa con los niños que juegan en el agua, quizás con sus colchonetas y cerca de los padres. Si piensen que es difícil que suceda algo riesgoso, lamentablemente se equivocan, como demuestra la historia que estamos por contarles.
La protagonista es una niña de apenas 4 años que, "montada" en su unicornio inflable, ha sido llevada mar adentro por la corriente cuando estaba jugando en el agua junto a sus padres, que no lograron recuperarla. Afortunadamente para ella, la desventura ha terminado con un inusual rescate por parte de un ferry.
via Greek City Times
Seguramente no sucede todos los días que la tripulación de un gran barco de pasajeros encuentre en la ruta un unicornio inflable a la deriva con un "pasajero". Esta, sin embargo, ha sido la escena frente a la que se encontraron los hombres del Salaminomachos, el ferry griego que afortunadamente se encontraba pasando en las aguas donde la niña se había escapado del control de sus padres.
El episodio ha sucedido en Grecia, en Rio Patras, no lejos de la ciudad portuaria de Patrasso. Los padres de la pequeña, cuando se dieron cuenta que, por causa de la corriente, no habrían podido alcanzarla, alertaron rápidamente a las autoridades locales, que tomaron las medidas necesarias para encontrarla y traerla nuevamente a salvo.
También el capitán del Salaminomachos, Grigoris Karnesis, había sido informado de la situación y cuando se encontró frente a la niña con su juguete prosiguió efectuando todas las maniobras necesarias para salvarlas de las aguas que la habían "secuestrado". La pequeña, una vez cerca del barco, se encontraba en un evidente estado de shock, como su mamá, en el momento en el que supo que su hija estaba sana y a salvo.
Una historia que por suerte concluyó bien, pero que podía terminar decididamente peor. No nos queda otra cosa que felicitar a los hombres que trajeron a salvo a la pequeña y esperar que tales episodios no sucedan más.