La conmovedora foto de una mujer con demencia en brazos de su marido: no recuerda nada pero se siente segura
Tener la suerte de compartir la vida con una persona especial, que sabemos que se quedará junto a nosotros para siempre suceda lo que suceda, no les pasa a todos. Hay quienes, luego de años de matrimonio y una familia a sus espaldas, saben que pueden contar al 100% con su pareja para afrontar cualquier dificultad. Phyllis y Stan están casados desde hace más de 30 años y luego de haber construido una hermosa familia, continúan estando el uno para el otro, incluso en los malos momentos. El desafío más grande ha sido cuando a Phyllis, de 52 años, le diagnosticaron una forma temprana de demencia senil. La mujer comenzó poco a poco a no recordar más nada y ahora su marido Stan la cuida las 24 horas como mejor puede. Muchas veces Phyllis no recuerda ni siquiera como se llama, pero recuerda y sabe bien que entre los brazos de Stan siempre estará segura.
Se ha convertido viral la foto de Stan que abraza a su mujer Phyllis mientras están sentados ambos sobre el mismo sofá. La mujer está en la típica posición que asumen los niños cuando están por dormirse entre los brazos de la mamá o del papá, indefensos pero seguros que van a recibir la protección de los padres. Desde cuando su enfermedad degenerativa no le da alguna tregua, Phyllis debe quizás sentirse un poco así, como una niña que no sabe y no recuerda muchas cosas del mundo, pero sabe perfectamente que Stan está allí para ella.
Facebook / Barbara Lea Campbell
Una foto que ha sido publicada por la hija de Stan y Phyllis en Twitter, que ha suscitado el amor y el apoyo de cientos de usuarios. Luego de haber dicho que la foto se había hecho viral, Stan de manera amable respondió: "No sé que es Twitter, pero sé que amo a mi mujer".
Lamentablemente, en el 2012 Phyllis ha comenzado a tener problemas haciendo algunas tareas del hogar simples y poco a poco comenzó a perder la memoria. Se trata de un duro golpe para una persona de 52 años, que había construido su pequeño reino durante los 34 años anteriores de matrimonio. Y es un golpe, quizás todavía más duro, para quienes la rodean: Stan, su marido y sus hijos...
La familia había abierto una página para recaudar fondos en GoFund me, para cubrir los gastos médicos de Phyllis. Lamentablemente, el trágico momento llegó luego de 5 años: Phyllis no lo logró.
Por un lado, quizás ha sido un alivio para todos, para Phyllis en primer lugar, la cual no lograba vestirse más por si sola o comunicar sus necesidades de manera correcta; no recordaba más ni los nombres de sus hijos. Por el otro lado, perder una mujer, una compañera de vida y una madre es un dolor inimaginable. Desafortunadamente no existe una cura definitiva para la demencia senil o para el Alzheimer, enfermedades que no dejan escapatorias a los afectados.
A pesar de todos los esfuerzos, lo que quedará grabado en la mente de todos será la sonrisa de Phyllis.
