Visitas de parientes y amigos a los recién nacidos: que cosa hacer y no hacer en absoluto
Cada nuevo nacimiento lleva consigo alegría y ganas de festejar. Estos sentimientos que involucran no solo a los padres de los recién nacidos sino también a los parientes y amigos. De hecho es sabido que una vez que entran a la casa con el bebé será abrumado de visitas de personas cercanas deseosas de conocerlo y mimarlo; no obstante las buenas intenciones que mueven estos gestos hay diferentes factores que igualmente deberían llevar a desistir.
via motherly.ly
Cansancio, lactancia y creaciones de nuevos lazos
Se sabe que cada niño para el propio padre es la criatura más especial del universo, pero hay que tener presente que la magia de los primeros momentos con él va dividida con el cansancio provocado por la escasa cantidad y la poca calidad de las horas de sueño. Quien tiene un hijo sabe de hecho, que a menudo a la noche se la pasa despierto y que si quizás el neonato se queda dormido durante el día se tienen otras tres mil cosas para hacer, por lo tanto nada de relax. Para la madre entra después la dificultad del amamantamiento al seno; aunque si es algo extremadamente natural de hecho se requiere tiempo para que el pequeño aprenda a comer en el modo justo y sobre todo para que llegue a saciarse y se sienta satisfecho. Sin olvidar además que cada familia tiene necesidad de tranquilidad y concentración para unirse con el bebé y entender de cada pequeño gesto si tiene molestias o si tiene necesidad de algo en particular en aquel momento.
Espacios para reorganizar y contaminaciones de evitar
Platos en el fregadero, ropa en desorden, juguetes esparcidos en cada habitación...puede ser de verdad extenuante recibir visitas justo en el momento en donde la propia casa parece haberse convertido en un terremoto, además del hecho que cada adulto convive con miles de bacterias para él no nocivas pero que podrían serlo para un neonato que todavía no ha desarrollado los propios anticuerpos. Un ejemplo práctico: un resfrío para nosotros puede ser de hecho una bronquiolitis para él. Si no se puede evitar el ingreso de amigos y familiares en las casas de los nuevos papás podemos al menos aconsejar de no tocar al niño si antes no se han lavado las manos pero sobre todo de aliviar la carga a los dueños de casa llevándoles algo útil como ¡alimentos o comida ya hecha!