"Intercambio sonrisas por un trabajo": un hombre de negocios se fija en un indigente y le ofrece un nuevo trabajo
Las crisis económicas son particularmente difíciles de afrontar, sobre todo para aquellas personas que son consideradas "invisibles" por la sociedad actual; estamos hablando de los pobres, los indigentes, de aquellos que repentinamente se han quedado sin trabajo y tratan a toda costa mantenerse a flote y llegar a fin de mes. Muchas de estas personas menos afortunadas que nosotros quieren solamente una segunda posibilidad y alguien que crea en sus capacidades. La historia emocionante que queremos contarles hoy habla precisamente de segundas oportunidades y de finales muy felices..
via Sò Noticia Boa
Rinaldo de Oliveira/Sò Noticia Boa
El protagonista de esta historia se llama Alex, tiene 33 años y nació en Minas Gerais, en Brasil; este joven fue abandonado por su madre cuando era aún muy pequeño y hasta los 4 años ha vivido exclusivamente con su padre en Rio de Janeiro, pero este falleció muy pronto. Una infancia vivida bajo la falta de las figuras paternales y de la pobreza. Debido a la reciente crisis económica que ha golpeado duramente al estado sudamericano, Alex se quedó sin trabajo e intenta buscar otro a pesar de la muy difícil situación.
Por este motivo, Alex no se desanimó y buscó trabajo de la manera más inverosímil que pueda existir: realizó un cartel con la frase "Intercambio sonrisas por un trabajo nuevo"; alguno tarde o temprano, lo notaría...
Rinaldo de Oliveira/Sò Noticia Boa
Y a notarlo de hecho ha sido un empresario de Rio de Janeiro Fábio da Silva Baptista, que quedó particularmente impresioado por esas palabras, lo invitó a su oficina e hizo una verdadera "entrevista" con él: "Tuve una conversación directa con él sobre su pasado. Está flaco porque simplemente no come. Hemos examinado su expediente y hemos encontrado un historial criminal limpio, nunca había hecho algo malo en el pasado. No tiene documentos válidos, pero mi equipo ya está trabajando para hacerle unos nuevos, pero tenía su número de seguro social y otros datos personales, todos en su cabeza."
Ahora Alex tiene 6 meses de alquiler pagados por un colega de Fabio, un trabajo en su compañía, todo el tiempo para trabajar duro y poder vivir finalmente una vida digna.
¡Buena suerte Alex!