Pareja gay está obligada a "restituir" la niña adoptada, solo después de 12 días: ahora los dos luchan para recuperarla
Decidir adoptar un niño es un paso muy importante para una pareja y seguramente no es una elección que se hace con el corazón frío, sin reflexionar sobre las consecuencias de tal acción. Seguramente, ofrecer una casa acogedora y mucho amor a un niño que arriesgaba de quedar huérfano es siempre una noble iniciativa. En muchos países, de hecho, adoptar no es absolutamente un proceso fácil y lineal, más bien es una experiencia marcada por la presencia constante e invasiva de la burocracia. Juliano Peixoto de Pina y Johnatan Pereira de Araujo es una pareja homosexual que ha decidido adoptar una niña pequeña, Aurora, pero su historia de adopción no es tan color de rosa como se podría imaginar.
Johnatan y su pareja Juliano habían logrado después de mucho tiempo adoptar una niña de nombre Aurora, rechazada por la madre biológica y por eso, dada en adopción. Después de haber respetado todos los trámites burocráticos, la pareja ha visto deslizar de sus manos el gran sueño de ser padres y darle una nueva familia a aquella niña. Aurora ha estado con ellos por 12 días, hasta que la mujer que inicialmente tenía la custodia ha decidido recuperarla y retirar la adopción.¿El motivo? Se sospecha, probablemente, que antes de esa decisión hubo motivaciones de naturaleza homofófica. Lo que es cierto, es que Thays Veiga, la "madre adoptiva" de la pequeña Aurora, que inicialmente había dado el consentimiento Johnatan y a Julio de adoptar a la niña, repentinamente se ha tirado atrás, reclamando ella misma el derecho de adoptar aquella pequeña criatura.
El día en que Juliano y Johnatan debían firmar los documentos que oficializaban la adopción, Thays ha negado su firma y ha pedido ayuda legal para iniciar una causa y recuperar la niña. La justicia increíblemente ha establecido que existe una unión entre Aurora y Thays Veiga, por la cual el juez ha ordenado la entrega inmediata de la pequeña a la mujer. La pareja está actualmente llevando adelante una larga batalla en tribunales para poder recuperar a su "hija". Inútil subrayar el dolor que la no adopción ha llevado a las vidas de Johnatan y Juliano, además de la mamá de uno de los dos jóvenes, la cual tiene 78 años y afectada de Alzheimer. "¿Cuando vuelve Aurora?" continúa preguntando la anciana mujer, para ella, ya completamente sometida a la enfermedad, se había encendido una pequeña luz de esperanza cuando la pequeña Aurora había entrado en sus vidas.
La decisión final la tendrá la Corte Suprema de Justicia y será respetada por ambas partes. Juliano y Johnatan podrían tener que decir adiós a su "hijita" después de haber vivido por 12 días como una familia, en este caso, deberán luego decidir si comenzar nuevamente otro proceso de adopción en el futuro.
