Publica fotos desagradables de la cocina del restaurante donde trabaja y es despedido en el acto
Trabajar en los restaurantes nunca es fácil y a menudo escuchamos a los camareros que desaconsejan antes de ir a comer afuera. ¿El motivo? Bueno, en esa cocina se ven muchos cocidos y crudos, y ni siquiera aconsejarían a su peor enemigo a que fuera a comer allí. Digamos que, lamentablemente, son muchos los restaurantes y los locales que fingen respetar las normas higiénicas y que ofrecen a sus clientes solamente productos e ingredientes de baja calidad, pero eso no debería ser normal. También está claro que los empleados que intentan públicamente desenmascarar estas irregularidades, advirtiendo a todos los potenciales clientes, están destinados a perder el trabajo para siempre. Ha sido esta la suerte de un usuario de Twitter llamado "nick", el cual quiso publicar algunas fotos del local en donde trabajaba, las cuales mostraban algunos desagradables trasfondos difíciles de digerir.
via Twitter / nick
El usuario de Twitter "nick" le mostró al mundo entero el verdadero aspecto de la máquina del helado del local donde trabajaba, así como los desagradables pisos manchados e incrustados de comida y quién sabe cuales otras sustancias. Fotos horripilantes que probablemente, bastarían para cerrar el local y que, en cambio, le costaron el despido de este empleado.
No es que la forma del despido no fuera predecible, pero, ¿qué hacer en estos casos? ¿Aceptar a ojos cerrados cada situación de injusticia que se nos imponga o actuar, por un bien mayor, a pesar de lo que está en juego? Entendemos bien que no siempre este buen discurso es aplicable a cualquier situación, a pesar de las buenas intenciones que hay detrás. Nadie, entonces, juzgará este tipo de decisiones personales, pero dejar que los clientes coman ingredientes vencidos, mal conservados o que, hasta incluso, entren en contacto con máquinas permanentemente sucias e incrustadas, es muy difícil. La ética de Nick, en este caso, se hizo cargo.
El joven publicó varias fotos que ilustran muy bien el "detrás de escena" del mundo de los restaurantes, o al menos, de una pequeña parte (no queremos generalizar, estamos convencidos que muchos locales respetan las normas higiénicas vigentes e intentan centrarse en una mejor calidad de los servicios).
Lamentamos que este joven haya sido despedido en el acto, pero esperemos que su acción le haya abierto los ojos a los clientes de ese local: la próxima vez, ¡lo pensarán dos veces antes de ir a comer allí!
