"Quería pedir una pizza": mujer llama al 911 y usa el lenguaje de código para escapar del abuso doméstico
No es la primera vez que un operador telefónico del 911 recibe una llamada para pedir una pizza, y ciertamente no es cuestión de haberse equivocado de número. Muchas de las personas que llaman a este número por emergencias son mujeres que se encuentran en una situación desagradable de abuso doméstico, en manos de convivientes o parejas que son violentas, vulnerables y que constantemente ponen en peligro la salud física y psicológica de su esposa o pareja. La historia que estamos por contarles hoy no la olvidarán jamás...
via CNN
Esta historia increíble le sucedió a Tim Teneyck, un hombre de Oregón en los Estados Unidos, que durante 14 años trabajó como operador telefónico para el 911, número de referencia para todos los ciudadanos estadounidenses que solicitan ayuda para varios tipos de emergencias. La llamada más extraña sin embargo se produjo cuando Tim levantó el teléfono y escuchó una voz femenina muy clara que afirmaba textualmente: "Quisiera pedir una pizza"
Tim no podía creer lo que escuchaba: ¿Esa mujer había realmente pedido una pizza? ¿Estaba realmente equivocada?
Tim no podía creer lo que escuchaba, entonces decidió averiguar si esa mujer se había equivocado de verdad con el número que había marcado en el teléfono. Del otro lado del teléfono, sin embargo, parecía no haber vacilación, tanto es así que la mujer no lo pensó dos veces y le dio su número personal y la dirección de su casa a Tim, cada vez más convencida de su "orden".
En realidad era todo un mensaje en código: esa pobre mujer del otro lado del teléfono no se había equivocado de número en absoluto, había llamado deliberadamente al 911 usando el código secreto de la pizza, que generalmente usaban las personas víctimas de abusos domésticos que no sabían como pedir ayuda de manera privada y segura...
Tim entendió finalmente la situación y no pudo evitar comenzar a usar un lenguaje en código para obtener más información de la mujer que estaba llamando en medio de una gran dificultad para comunicarse libremente; el operador, que trabajaba en el call center del 911 desde hace 14 años y jamás había recibido un "pedido" tan particular, continuó usando un lenguaje en código aparentemente inocente con la mujer del otro lado del teléfono, y mientras tanto estaba intentando enviar una patrulla de policías a su dirección, con las sirenas apagadas para no llamar la atención de la pareja violenta.
Cuando los agentes llegaron a la escena descubrieron que el problema no era la pareja de la mujer que había "pedido la pizza" sino del novio de la madre, que había regresado a la casa borracho, molesto y estaba golpeando a la anciana señora; suerte que Tim se dio cuenta rápidamente que la situación no era para nada tranquila y envió inmediatamente una patrulla a la dirección designada.
¡Una "pizza" que ha salvado una vida y que podría salvar muchas otras en el futuro!
