A los 30 años se convierte en mujer y la hija de 3 años lo acepta por lo que es: "Eres hermosa"
Una familia es siempre una familia, ya sea considerada tradicional o no. No está dicho que para formar un núcleo familiar perfecto deba haber un padre, una madre y un hijo, lo importante es que dentro de la casa reine el amor como valor supremo y que todos los miembros que la integran sientan cariño y respeto recíproco hacia el otro, a pesar de las elecciones de vida que se puedan emprender. Esta es la historia de Rachel Does, una mujer de 30 años de Iowa, en los Estados Unidos que hasta los 28 años tuvo que reprimir una parte muy importante de sí misma...
via Daily Mail UK
Sí, porque Rachel Does no nació mujer, sino que se convirtió en la que hoy todos conocen, admiran y la que todos quieren mucho después de muchos años y años de crisis interiores y represiones de su verdadero ser. Rachel nunca sintió que pertenecía al mundo masculino que le había dado la madre naturaleza, por este motivo desde los 6 años tuvo que esconderle a la familia y a sus amigos este aspecto de ella. Pero en agosto del 2011 Rachel se encontró con Lindsay Does, se casó con ella y dio a luz a una hermosa niña llamada Raelee; lamentablemente el matrimonio no duró mucho tiempo, por lo que la pareja se dejó definitivamente en febrero del 2019.
Luego de la separación con Lindsay, Rachel sabía que era el momento de abrazar definitivamente lo que sentía que era realmente y que siempre le había escondido a todos; cuando aún era un hombre, había comenzado a someterse a un tratamiento hormonal, que a los meses siguientes le habría dado características fisiológicas cada vez más similares a la de una mujer; el hombre comenzó también a vestirse y a maquillarse como una mujer, y al final la nueva Rachel se declaró frente a todos, sin volver a esconderse nunca más...
No solo todo el mundo se lo tomó bien, desde los amigos, familiares hasta los colegas de trabajo, sino también la pequeña Raelee que con sus 3 años aceptó a su "nuevo papá" sin discriminación alguna. Rachel contó su experiencia: "Comencé la transición cuando mi hija tenía solamente un año y comencé a maquillarme y a vestirme de manera más femenina. Un día, mi hija me preguntó porqué me maquillaba y yo simplemente le dije "porque me gusta" y ese fue el final de las preguntas. Mi hija es la mejor de todas, dado que es la niña más abierta que haya conocido y siempre está ahí para abrazarme y hacerme saber que está aquí para mi. Todos los días me dice "te amo" y, "eres hermosa", no creo que pueda tener la fuerza de ser mi verdadero yo sin ella. Ella aún se dirige a mi como "papá" y está bien así, la respeto y la dejo elegir como llamarme."
La lección de vida que ha aprendido Rachel es realmente preciosa y debería ser una enseñanza para todas aquellas personas que todavía tienen miedo de "salir al descubierto" y sentirse simplemente ellas mismas, sin el miedo de los prejuicios de los demás: "Nunca es demasiado tarde para salir al descubierto y tu felicidad y tu salud mental son muy importantes, ¡si yo puedo hacerlo, cualquiera puede hacerlo!"
¡Felicitaciones por tu valentía y por tu nueva vida, Rachel!
