Tira un billete de la lotería, pero el propietario del bar se lo devuelve: mujer gana 1 millón de dólares
Ganar a la lotería es el sueño de mucho y es obviamente, un objetivo casi inalcanzable, pero ganar, perder el billete y luego ser devuelto por un honesto comerciante parece de verdad una fábula. Sin embargo, la fortuna de una mujer distraída y la honestidad de un comerciante indiano han hecho que el billete ganador vuelva a las manos del legítimo dueño. Lea Rose Fiega había comprado uno de esos billetes raspa y gana en el kiosco situado cerca de su trabajo. La mujer estaba en la pausa del almuerzo y muy rápidamente ha raspado los números del billete, imaginando no haber ganado nada. Lea pensaba haber raspado todos los números y haciendo como quien sabe perfectamente no haber ganado nada, ha tirado el billete. Un grave error, pero afortunadamente la suerte y la honestidad del comerciante la ayudaron.
via The Guardian
Lea Rose Fiega había comprado un raspa y gana de 30 dólares, en el minimercado "Lucky Stop" en Southwichk, con la esperanza de ganar el precioso minipremio: un millón de dólares. "Estaba apurada, en la pausa del almuerzo y he raspado muy rápidamente, lo miré y no parecía haber ganado algo, entonces lo entregué en el negocio para que lo tiraran", ha contado la mujer. Aquel billete ha quedado en la basura del negocio por casi 10 días, hasta que el propietario, Maunish Shah, se puso a controlar los billetes tirados por sus clientes. Cuando ha encontrado el de Lea, ha notado que no todos los números habían sido raspados, entonces ha querido completar el juego, quizas como superstición. Nunca un gesto así fue tan apreciado: la mujer se había olvidado de raspar justo el casillero ganador, ¡aquel que le habría entregado 1 millón de dólares!
Asombrado del resultado, Maunish Shah ha comenzado a llamar a sus parientes en la India, los cuales le han sugerido devolver el billete: "¡No queremos ese dinero!". Entonces, el generoso propietario ha restituído a Lea el billete ganador (sabía que había sido la mujer, cliente habitual del negocio, a tirarlo apresuradamente), provocando en la mujer una reacción de inmenso asombro, alegría y gratitud. La honestidad del propietario ha sido repagada, en cuanto al negocio habría podido ganar 10.000 $ de comisión de la lotería estatal, por la venta del billete ganador.
¡En un cierto sentido, todos han ganado algo en esta historia!
