Un joven de 13 años da a cambio su Xbox por un auto para regalar a su madre
Muy a menudo ocurre que los adolescentes son clasificados como holgazanes o tienen pocas ganas de ayudar a los padres en las tareas domésticas. Desde siempre, las generaciones más ancianas regañan a los más jóvenes por no estar a la altura de las expectativas, sin embargo no es así. Frente a una información a menudo demasiado escandalosa, la verdad es que hay un montón de jóvenes altruistas, generosos y que son aspiración para muchos: el joven William es parte de aquellos jóvenes...
Un intercambio insólito...
Es el caso de un joven de 13 años del estado de Nevada en los Estados Unidos, William Preston, que ha decidido ayudar a su madre con un regalo extraordinario: un auto nuevo. A primera vista parece imposible, sin embargo el joven ha logrado planear un modo para obtener el auto sin gastar un centavo. Su inspiración proviene de las redes sociales. Después de haber visto algunos videos donde hay personas que regalan un auto a sus padres como sorpresa, ha decidido que debía tener que hacerlo también él. La felicidad de su madre es desde siempre muy importante para William.
Entonces, con gran determinación, este joven se ha remangado las mangas. Inicialmente, William se puso hacer muchos trabajos para poder ahorrar un poco de dinero. También, se daba cuenta que sus esfuerzos no bastaban para llegar a los precios de lista de los automóviles. Pero un día, sucede algo increíble: ve una publicación en Facebook que publicitaba una Chevrolet Metro de 1999 en venta y a un óptimo precio y que habría sido perfecta para las exigencias de su madre.
Quien lo habría dicho
Aunque siendo extremadamente económico, el auto igualmente tenía un precio superior al presupuesto ahorrado por el joven. Entonces, para terminar la contratación, el adolescente ha propuesto un intercambio único en su estilo: ¡su Xbox como saldo final por el precio del auto! En un primer momento la vendedora, después de la extraña propuesta, se ha tirado atrás un poco incrédula, pero después de pocos minutos ha llamado al joven: lo había pensado. El auto, entonces, era finalmente suyo, pronto para ser entregado a su madre que, hasta aquel momento, no esperaba nada.
El día de su cumpleaños, la mamá de William no podía creer lo que veían sus ojos. En la calle estaba el Chevrolet allí y a esperarla su hijo que tenía las llaves. La alegría de la señora fue incontenible, tanto de agradecer con las lágrimas en los ojos al hijo por la idea tan premurosa. ¿Quien habría dicho que un joven de 13 años decidiera intercambiar su amada Xbox por un auto para regalarle a la madre?